Un muchacho de 22 años de Ohio llamado Richard Humphrey que estaba en detención domiciliaria desde un tiempo por crímenes que no tienen nada que ver con este caso, decidió durante este tipo abrir un sitio, llamado USAwarez, donde permitía descargar películas y diferentes aplicaciones.
Gracias al incremento de visitas que tuvo Humphrey decidió tener una sección privada en la que, para ingresar, se tendría que abonar US$16 al año (como si le faltaran problemas). Aquellos que pagaran tendrían acceso a películas antes que aparecieran en el cine y los juegos y aplicaciones más esperadas.
Sabemos que el delito por comercializar contenidos de los cuales no tienes los derechos tiene un destino: la cárcel. Ahí es donde tendrá que pasar los próximos 29 meses ya que cientos de copias de diferentes archivos con copyright fueron compartidos y él generó una ganancia a partir de ellos.
Las pérdidas, según declaró el juez que tuvo la causa, fueron aproximadamente entre US$10 mil y US$30 mil y además de haberlo metido tras las rejas también le confiscaron todos sus equipos, lo cual es bastante lógico.
Yo me pregunto si este muchacho sabría que esto era algo completamente ilegal porque si sí lo sabía, estando en detención domiciliaria y además de todo generar ganancias a través de estas prácticas, es dispararse en el pie.
Foto: RocketRaccoon