El Kindle, el lector de libros electrónicos de Amazon, está avanzando de una manera realmente precipitada en el mercado mundial, pero no todo es color de rosas para el gigante del comercio por Internet. Tres universidades norteamericanas que estaban realizando un programa piloto para usar el Kindle en clases, han acordado con el departamento de justicia de EEUU suspender el plan hasta que el eReader pueda ser utilizado por estudiantes ciegos.
Dos organizaciones que defienden los derechos de las personas invidentes demandaron a las universidades para suspender el plan. Y aunque el Kindle tiene la posibilidad de transformar el texto en audio, no ocurre lo mismo con las opciones del menú, haciendo imposible la navegación del sistema por parte de ciegos.
En palabras del asistente del fiscal general Thomas Perez:
El avance de la tecnología está cambiando sistemáticamente la forma en que las universidades se aproximan a la educación, pero debemos estar seguros que las tecnologías emergentes ofrecen las mismas oportunidades a los estudiantes discapacitados
Lo que quizás es un obstáculo para Amazon puede convertirse en algo muy bueno, crear un sistema para que personas con discapacidades visuales puedan usar el Kindle. No debe ser muy difícil hacer el cambio en el software y permitir el uso del dispositivo a los ciegos. Al final de cuentas, si los lectores de libros electrónicos siguen su desarrollo creo que serán una gran herramienta para las personas invidentes. La tecnología que transforma los libros en audio abre un mundo de posibilidades para personas discapacitadas y puede igualar ciertas oportunidades con el resto de los estudiantes.