En varios post de MacRumors de los últimos días se menciona que Apple podría incorporar una brújula digital (magnetómetro tal como ellos lo llaman) en el iPhone que probablemente vea la luz en junio. Manuel Ángel lo reseñaba el martes en uno de los post. Aprovecho la ocasión para hablar sobre qué supondría esto exactamente.
Sabemos que el iPhone actual trae un acelerómetro, con él se puede determinar el eje y grado de inclinación del aparato. Obviamente en una superficie plana, por mucho que giremos el gadget, este sensor no puede saber en qué estado se encuentra sobre el plano, cuán girado está. Es por eso que el concepto iHologram del que os hablábamos hace poco, es una aplicación que de momento es éso, sólo un concepto que no se puede implementar en una superficie plana (aunque quizás sí podría hacerse sobre un plano inclinado).
Ahora imagina esto: estás en Madrid apuntando la cámara del iPhone hacia un edificio histórico del que desconoces el nombre, ¿y si el iPhone fuese capaz de decirte qué edificio es? Esto sería posible gracias a la brújula digital combinada con el GPS. Podemos imaginarnos al iPhone funcionando como las gafas de las películas futuristas, mostrando la información de cualquier lugar al que miremos con el iPhone. Para los aficionados a las estrellas se podría implementar otra aplicación, apuntando el aparato al cielo nocturno, éste podría decirnos qué constelaciones son las que vemos.
En todo esto os debo decir que no sería necesario que el iPhone estuviese en un plano horizontal, siempre que la brújula implementada fuese >una brújula en tres ejes, no sólo en dos. O sea, no importaría que el iPhone estuviese de pie o tumbado, la brújula seguiría funcionando igual. ¡Por favor, Apple, incluidlo! ¡Que los rumores sean ciertos!.