México es uno de los países más recientemente incorporados al grupo de 30 naciones que conforman la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos, cuyos miembros se consideran entidades desarrolladas con mercados estables.
Taylor Reynolds, administrador de la División de Política de Información y Comunicaciones de la OCDE, hizo notar el precario estado de las telecomunicaciones mexicanas e incitó a trabajar para resolver eso. Básicamente, México es quien tiene las tarifas más altas de telefonía e Internet de los 30 países en cuestión, ofreciendo además un servicio malo en comparación a otros países del grupo.
¿Y qué con esto? Reynolds hizo un llamado a la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) para tomar cartas en el asunto y actuar para solucionar esta situación, dijo que en una última instancia debería considerar dividir Teléfonos de México. Sugirió además usar la red de fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad que estima que se está desaprovechando. En su opinión, estas deficiencias estarían limitando el desarrollo económico del país, que se mantiene como el único de los miembros de la OCDE donde la infraestructura es usada por una única empresa, en detrimento de la competencia.
La Cofetel respondió en breve, dijo no compartir el punto de vista de Reynolds y que ya están tomando medidas para compartir la infraestructura (con el plan de interconexión del que hemos hablado anteriormente). De dividir Telmex no hablan, apenas refieren "regulaciones más estrictas" en caso de ser necesario.
Ya puedo imaginar la impresión que causamos como país al tener a lo más 2MB de velocidad de Internet, una auténtica vergüenza dadas la condiciones. Hablar de dividir al gigante era volar, pero en parte me da gusto que hagan notar estas cosas, a ver si con presión se apuran con esas soluciones.