Teddy Bautista, presidente del Consejo de Dirección de la SGAE y fiero cancerbero de los derechos de autor, lo ha vuelto a hacer: dispararse en el pie ya se ha hecho una costumbre para él y lo demuestra cada vez que abre la boca:
Con el 'copyleft', en opinión de Bautista, el autor "deposita de buena fe su obra, pierde el control" de la misma y "está expuesto a que otra persona pueda usarla y volverla a reponer como si fuera propia".
"No tenemos nada en contra del 'copyleft', nos parece interesante para la comunidad de autores que son ricos de cuna y que no tienen que pagar el pan de sus hijos -ha añadido Bautista-, pero nosotros estamos en otra cosa: que el autor viva de su obra, como un albañil de su trabajo".
Ahora me contarán que todos los autores inscritos en la SGAE viven de lo que ingresan. Hagamos memoria y recordemos unas bonitas cifras:
Según la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), el reparto de un disco original en cualquier tienda de España por un valor de 15€ (precio medio habitual de un CD), sería el siguiente: un 9,4% corresponde a los autores (lo que equivale a 1,42 euros); un 13% del disco corresponde al distribuidor (2 euros); el 16% corresponden a los ingresos de hacienda a través del IVA (2,4 euros); el 26% es el beneficio de la tienda (un total de 4 euros); y los ingresos de la compañía discográfica alcanzan el 34,6% (supone 5,19 euros por disco).
Hay que vender muchísimos discos para vivir de lo que deja la SGAE, sin tomar nota de los 15€ que vale el disco, ni que el artista tiene que pasar por el aro de la discográfica. ¿De verdad un autor quiere hacerse rico con los derechos de su música o quiere darla a conocer? Os lo dejo de tarea, pero algo queda claro, con el copyleft los que sí pierden mucho son las tiendas y las disqueras.