Nokia ha realizado un curioso concepto de un nuevo terminal pensado para durar "eternamente" (entiéndase la exageración). Este teléfono está pensado para durar al menos 25 años gracias a un chip interno que evoluciona y es capaz de ir ejecutando las nuevas aplicaciones que vayan saliendo sin necesidad de cambiar el hardware. Os dejo con un vídeo del terminal.

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Aunque la idea parece muy bonita la veo bastante irrealizable. Primero porque todos sabemos que la tecnología evoluciona de forma tan rápida que es imposible que un terminal se adapte a esos cambios durante dos décadas; segundo, porque aunque nuestro teléfono nos sirva para realizar nuestras tareas más habituales, siempre nos acabamos cansando de algo que llevamos encima a todas horas; y tercero, porque para Nokia no creo que sea muy rentable que un teléfono pueda durar tanto.

Vía | NokNok.tv