Hay algo en las mañanas que me hace sentir toda la ciudad. Llevo desde hoy, cuando me levanté pensando en como explicarlo pero no encuentro las palabras exactas, pero tengo la teoría de que cada ciudad tiene algo, una sensación, un olor, una característica única que se evidencía en las mañanas, pero es en una hora en especial, creo que como 30 minutos después de que sale el sol.

Tengo dos mañanas favoritas en obviamente dos ciudades diferentes.

Una es aquí en la ciudad de México, hay como un frio especial, a veces esta todo un poquito nublado, a causa de la contaminación o de la temperatura, la gente está un poquito más calmada...solo un poquito...y mientras caminas viendo a los niños prepararse para la escuela y oliendo las tortas de tamal que algunas personas comen de desayuno (por supuesto) te das cuenta que todo el conjunto lo hace único.

La otra es en Salinas, una playa de Ecuador. Durante un día entre semana o un domingo en temporada y si tienes un departamento en el malecón sentirás algo raro, pero interesnate al estar sentado en el balcón viendo la playa, sintiendo el aire, y escuchando el silencio de una calle totalmente vacía, mientras a lo lejos ves a los pescadores que van o regresan de su labor diaria.

...mágico...

10 respuestas a “En la mañana”