La espera de este segundo capítulo pareció más larga casi que la espera por el inicio de la temporada. Y es que sabíamos que no se podría postergar más lo que los fans alrededor del mundo esperamos con ansias.
Sin embargo, esto no es lo único interesante que hay en este capítulo que se extiende y se entretiene en lo que marcará el destino de muchas cosas en lo venidero. Lo cierto es que en casi todo lo que vimos implica una pequeña luz de esperanza para los niños Stark (y Jon).
Bran
Por fin pudimos ver a Bran en su entrenamiento con Bloodraven/Brynden Rivers/Cuervo de tres ojos. Esto confirma lo que pudimos deducir de la sexta temporada de Game of Thrones: veremos al joven Ned y Robert Baratheon en sus épicas batallas, quedaba la duda de cómo se introducirían estos relatos y por lo que disfrutamos en este segundo capítulo parece que lo haremos junto a Bran. Por lo pronto pudimos ver a los jóvenes Stark (Ned, Brandon, Lyanna y Benjen) entrenando en Winterfell en una lejana época. Y para nuestro gusto pudimos ver a Hodor cuando era un mozo y cuando hablaba, ¡ay, Hodor!
Como todos los sabios entrenamientos, el ritmo en el que se ven resultados no son los esperados para el resto de los mortales, así que seguiremos esperando junto con Bran y su comitiva el propósito de esta larga espera.
Arya
Lo mismo va para la Niña sin nombre que por fin se le pinta una nueva realidad, así como un nuevo entrenamiento en el que seguramente tendrá que poner toda la dedicación, convicción y devoción, pues ya descubrimos que Faceless Men no se anda con rodeos ni miramientos.
Sansa
Sansa reconoce ante Brienne que habría sido bueno seguirla cuando ésta le ofreció ayuda, y cómo no si a este personaje no le ha pasado cosa buena desde que salió de Winterfell con su familia para nunca más volver a ser la misma (ella y su ahora reducida familia). Theon por fin logra hilar un par de pensamientos y le deja saber a Sansa que quiere regresar a su hogar; llegará justo a tiempo ahora que ha quedado sin líder el Reino de la Sal. Evento que recuerda que alguna vez Game of Thrones se basó en las gruesas novelas de George R.R. Martin, este es acaso de los últimos eventos que recordarán directamente las novelas.
Ser Davos
Él es sin duda la clave del evento que marcará el destino en todo Westeros (y más allá del Muro), y es que la influencia de él para con Melisandre, la Bruja Roja (quien nos reveló su impresionante secreto) fue vital para que todos termináramos lanzando vítores a la pantalla. Con este hecho Castel Black y toda la Guardia de la Noche nunca más volverá a ser la misma.
Tommen
Un reducido Rey está frente al cadáver de su hermana, junto a él permanece su tío-padre-guardia Jaime quien le aconseja hablar con su madre y pedir su perdón por sus tímidas acciones. El que Tommen se acercara a la Reina Madre para que le ayude a ser fuerte y defender a los suyos (suyas, léase: esposa) depara una nueva posición de poder para Cersei quien seguro solo regresará más feroz.
Lord Bolton
Ramsay no deja de dar muestras de su alma despiadada y codiciosa. Sin duda se trata de uno de los personajes más maniqueados de toda la serie. Pero bueno, desde este capítulo existe un nuevo Lord Bolton: Ramsay. Despejada la competencia y los sucesores, no queda más que fortalecerse y hacer aliados. Así pues, el Juego de Tronos sigue su curso y el finado Lord Bolton pagó con sangre, la suya y la de su familia, la traición a la familia Stark. Vaya...
Rhaegal
Rhaegal y Viserion han estado por ya bastante tiempo en las catacumbas de Meeren esperando a que su madre se digne a quitarles las cadenas que los mantiene ahí y no en libertad como habían nacido. En este capítulo pudimos ver cómo Tyrion se acerca a estos dos hermanos dragones para liberarlos. Este hecho nos hace ver que los dragones son más que fieras sin domesticar, agresivas y escupe fuegos sino seres inteligentes y capaces de sopesar las situaciones.
Si algo nos ha enseñado Tyrion es que sabe muy bien gobernar. Bien dice el dicho que "para que el hombre nazca debe morir el padre", Tyrion se lo tomó muy literal, sin embargo, ha demostrado, de nueva cuenta que puede hacerse cargo de todo un reino. Veamos cómo le sale esta movida con los hijos dragones de la Madre de Dragones que en este capítulo no vimos.
Jon
Un lobo huargo, blanco como la nieve, duerme fielmente al lado del cadáver de su amo al que la Bruja Roja intentó traer a la vida. Los testigos se fueron cansando de las repeticiones de los rezos de Melisandre y se salieron del lugar; uno a uno abandonó la esperanza en la sacerdotisa de R'hllor, incluso ella misma se marchó derrotada.
Y sí, luego de las miles de teorías, de las especulaciones y de todas las elucubraciones vemos a Jon regresando... ¿a la vida? Esa cuenta está pendiente, veamos las condiciones de este nuevo estado y lo que esto significa para todos aquellos que pertenecen a este universo de A Song of Ice and Fire.
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