Durante el CES 2016 pudimos ver las primeras creaciones salidas del horno del Creative Lab Projects de Samsung, desde un cinturón sanitario que ayudaba a las persona a controlar el peso y los hábitos diarios, hasta un controlador de movimiento para realidad virtual móvil. En el MWC también se les unieron las zapatillas IoFIT, otro proyecto nacido del mismo programa, y pudimos probarlas y sorprendieron por su capacidad de ofrecer consejos usando la cámara de un smartphone como guía. Ahora llegan tres nuevos conceptos experimentales, y el más interesante es Entrim 4D.
La idea principal tras Entrim 4D es dar al usuario muchos niveles más de inmersión de los que ofrece actualmente cualquier solución de realidad virtual, como Gear VR. Esta idea ya la hemos visto plasmada con sillas 4D en, por ejemplo, la montaña rusa realizada precisamente con las Gear VR. La novedad es que, para simular todo eso, se utilizan señales acústicas en vez de movimiento.
Usando una combinación de algoritmos, electrodos y estimulación vestibular galvánica, que envía mensajes eléctricos a un nervio en el oído, los auriculares Entrim 4D son capaces de sincronizar nuestro cuerpo con los cambios de movimientos de los vídeos. La idea es que la realidad virtual no sólo se experimente con la vista, sino con todo el cuerpo. Pero, a diferencia de las sillas 4D, que resultan muy caras y poco accesibles en espacio para la mayoría, Entrim 4D ofrece, en muy poco espacio, una experiencia similar, según el equipo de desarrollo. Para mejorar más la idea, están trabajando en añadir electrodos que crean sensación de movimiento rotacional.
Aunque aún se encuentra en fase experimental, después de haber realizado 1500 pruebas, eso sí, otro de los aspectos que Entrim 4D trata de solucionar son los mareos que la realidad virtual produce, a veces, a causa de la diferencia entre lo que creemos estar viviendo, y lo que realmente estamos experimentando en una pantalla.