**Hoy se celebra el día internacional de los datos abiertos, una fecha que busca movilizar a la gente en todo el mundo en torno al concepto de datos abiertos u "open data", la noción de que la información (en particular, la información generada por los gobiernos) debe estar a disposición de los ciudadanos y de la sociedad sin requerir de permisos especiales.

En Latinoamérica, sólo cuatro países figuran en una buena posición en el Índice Global de Datos Abiertos 2015, elaborado cada año por Open Knowledge International. Los más destacados son Colombia (en cuarto lugar) y Uruguay (en el séptimo). Les siguen Brasil (en el puesto doce) y México (en el trece). Sin embargo, de acuerdo con OKFN, la puntuación mundial para el año 2015 cayó de 12% a 9%, lo que significa que de los conjuntos de datos disponibles en los 122 países analizados, sólo el 9% califica como datos abiertos.**

¿Qué hace a los datos, datos abiertos?

Según la "definición abierta", que establece los principios que definen la apertura en relación a datos y contenido, "abierto" significa que cualquier persona puede acceder, usar, modificar y compartir libremente los datos, con cualquier finalidad, sin ningún requisito, con la excepción de requerimientos que se establezcan para preservar la apertura. De este modo, un contenido abierto debe cumplir con cuatro requisitos:

1. Una licencia o estatus abierto

Esto significa que el contenido **debe estar en el dominio público, o debe proporcionarse bajo los términos de una licencia abierta.** Las licencias aceptadas deben, a su vez, cumplir con una serie de estándares, y una lista de licencias que están conformes con los requisitos puede encontrarse en el sitio web de la definición abierta. Entre éstas se encuentran las licencias **Creative Commons** BY y BY-SA 4.0.

2. Acceso

El contenido debe proporcionarse en su completitud, y debe ser descargable a través de Internet sin ningún costo. Cualquier información adicional que se requiera (por ejemplo, los términos de la licencia) debe proporcionarse junto con el contenido.

3. Legible por máquinas

El contenido debe proporcionarse de un modo que sea fácil de procesar por una computadora y donde sus elementos individuales puedan accederse y modificarse de manera sencilla. De aquí que **los datos gubernamentales publicados en formato PDF no sean considerados datos abiertos**, ya que imponen pasos adicionales para extraer la información y convertirla en un formato que permita su procesamiento y reutilización.

4. Formato abierto

Continuando con la legibilidad, el contenido debe ser proporcionado en un formato abierto. Se denomina formato abierto a aquel que no pone restricciones (financieras o de otro tipo) sobre su uso, y que puede ser completamente procesado con (al menos) **una herramienta de software de código abierto**.

datos abiertos
Open Data por descrier, bajo licencia CC BY 2.0.

Datos abiertos en el mundo

Si bien Colombia, Uruguay, Brasil y México aparecen en buenas posiciones, Costa Rica, Argentina, Paraguay, Guatemala, Panamá, Guayana, El Salvador y Ecuador están por debajo de la mitad de la tabla, y países como Venezuela ni siquiera aparecen en el análisis por no ofrecer datos (no digamos abiertos, sino en general). En Latinoamérica queda mucho trabajo por hacer, en particular en lo que respecta a información como calidad del agua y propiedad de la tierra.

Si observamos los diez primeros lugares del índice, el sector de información en el cual incluso los países con mejor desempeño siguen fallando es el de gasto público, un área cuya apertura es esencial por definición para disminuir la corrupción y garantizar la transparencia en la gestión pública. También observamos que algunos países cuyos estándares son abiertos para la mayoría de la información, tienen en cambio un desempeño terrible en áreas específicas, como es el caso del Reino Unido en lo que respecta a los datos electorales, o Estados Unidos en cuanto a propiedad de la tierra.

Por otra parte, en los últimos años se ha visto un auge del periodismo de datos, incluso en contextos donde no existen leyes de acceso a la información y por lo tanto el acceso a datos públicos es muy mínimo. Estas iniciativas pueden proporcionar datos y generar reportajes sobre éstos que permitan a la ciudadanía interpretar estas cantidades masivas de información, pero además resultan de gran importancia para incidir sobre la apertura de datos de cada país, ejerciendo la presión necesaria para la adopción de estándares en los que la información se haga pública, accesible, fácilmente utilizable y legible en formatos abiertos.

En todo el mundo, la tendencia sigue moviéndose hacia datos más abiertos y accesibles: el rol de la sociedad civil y del periodismo consiste en ejercer la presión necesaria para que los Estados adopten y hagan cumplir las normativas necesarias, creando así legislación en materia de acceso a la información pública, y constituyendo los repositorios necesarios para que cada ciudadano pueda acceder a esa información.