Uno de los grandes problemas a los que se enfrentan las cámaras es a las propiedades de la física. Y es que de momento, tal y como nos ocurre a los seres vivos, no son capaces de atravesar obstáculos como muros o planchas metálicas. Esto no suele ser problemático cuando hablamos de cámaras fotográficas o móviles que como fotógrafos podemos cambiar de posición de manera fácil, pero imaginemos en cámaras de vigilancia, normalmente fijas en todos los ejes. Suele ser muy costoso tener gran cantidad de cámaras cubriendo cada rincón de un espacio, por lo que hay que buscar alternativas.
En la Universidad Heriot-Watt de Edimburgo han estado investigando para conseguir la primera cámara que puede seguir el movimiento casi en tiempo real pese a encontrar una pared en forma de esquina, como vemos en el esquema. ¿Cómo se consigue? La explicación puede ser sencilla, pero cómo llegar una realidad práctica debe haber requerido mucho tiempo y gran dedicación. Y a esa realidad se consigue llevar gracias a la unión de un láser ultrapreciso y de una cámara de alta sensibilidad que puede detectar y seguir fotones individuales. El láser emite la su luz sobre el suelo, lo que hace que las ondas salgan disparadas en todas las direcciones y la cámara es capaz de recoger los reflejos de la luz rebotada en objetos que no están detro de su campo de visión.
Esto se hace 67 millones de veces por segundo para conseguir una "foto precisa". Si el objeto se mueve, se puede medir con un retardo de 3 segundos, y dependiendo de cuanto tarde la luz y su forma en regresar, se puede medir su tamaño y forma. Desde la investigación afirman que incluso se pueden llegar a medir varios objetos a la vez.
Además de en cámaras fijas, esta tecnología podría aplicarse en futuras implementaciones de vehículos que necesiten mayor visibilidad de la que los humanos de por sí tenemos al conducirlos, con el objetivo de evitar colisiones, o por ejemplo en zonas de difícil acceso en rescates en helicóptero. Hasta ahora los avances en cámaras se están centrando en fotografía tradicional y móvil, pero con el **aumento de dispositivos y vehículos autónomos, todo lo que pueda ayudar a un ordenador a tomar las decisiones adecuadas es bienvenido.