La comunicación entre coches es un paso fundamental para el desempeño de la movilidad autónoma, coches que hablen entre sí para mejorar la seguridad en la vía pública, pero ¿qué tipo de red usarán? Ford hace unos meses comunicó que están trabajando en este campo y ahora Nokia junto al Gobierno alemán han realizado una prueba usando la red 5G, con unos resultados más que prometedores.
La comunicación entre coches sigue siendo un problema puesto que no solo deben hablar, sino entenderse.
Esta primera demostración de comunicación entre coches se llevó a cabo en la nueva autopista A9 inaugurada recientemente en Baviera, en el sur de Alemania. Las redes inalámbricas, y en especial el 5G, son particularmente interesantes para Nokia por la velocidad de la conexión pero también porque será empleada por más dispositivos y su impulso será más rápido gracias a los smartphones.
Según Kathrin Buvac, jefe de estrategia de Nokia Networks, el retraso en la transmisión mínimo es de 20 milisegundos y el máximo sería de 100 milisegundos, por lo que podría ser suficiente para los coches comuniquen entre sí su posición con muy poco retardo. En estas pruebas se han alcanzado estos datos, pero la teoría indica que el tiempo podría llegar a reducirse hasta los 2 milisegundos, aunque es, de momento, teoría.
¿Cómo se comunicarán los coches autónomos y los coches que no sean autónomos? Esta es la cuestión más importante, por encima de la red que usen para comunicarse los coches. Es vital que compartan datos como la posición, velocidad o si hay alguna perturbación en el tráfico para que reduzcan su velocidad, y un coche autónomo podrá definir una respuesta, en un coche convencional, el usuario es el que debe tomar la decisión, solo que ahora tendrá mucha más información.
Imagina que un coche que circule varios kilómetros por delante del nuestro nos informa de que ha tenido que realizar una frenada de emergencia y ya nos indica que algo ha pasado y debemos extremar la precaución, nuestro coche comunicará a los que vayan por detrás esta información para que los sistemas GPS de los coches puedan tomar otra salida de cara a evitar la retención.
¿Es futuro? Si, pero es solo un ejemplo de la importancia de la comunicación entre coches, y el uso del 5G para ello suena prometedor, aunque aún quedan varios años de desarrollo y sobre todo, tendrá que existir un solo protocolo para todos los fabricantes y no puede suceder lo mismo que la guerra entre cargadores de coches eléctricos.
