VocalIQ emplea el machine learning (aprendizaje automático) para desarrollar asistentes virtuales que intenten recrear el tipo de comunicación entre máquina y persona que habitualmente vemos en las películas de superhéroes — Tony Stark hablando con Jarvis en Iron Man, por ejemplo — o ciencia ficción.

La tecnología que VolcalIQ desarrolla junto a su procesado de voz y aprendizaje automático puede ser incorporado en multitud de dispositivos como weareables o controles de domótica, pero la startup siempre se ha enfocado en las aplicaciones para automóviles. Incluyendo la colaboración con General Motors.

Tony Stark hablando con sus asistente Jarvis.
Tony Stark hablando con sus asistente Jarvis.

En su blog mencionan multiples veces la necesaria cohesión — a su entender — entre la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas, declarando el entendimiento entre hombre y máquina algo semejante a cómo nos entendemos hablando las personas. Ese aprendizaje automático tiene como último objetivo que el asistente virtual te responda las preguntas tal y como podría hacerlo cualquier persona que hable tu idioma, pero con toda la inteligencia centralizada de los servicios en su cerebro.

Esta podría ser la herramienta para mejorar Siri o simplemente poder dar al asistente métodos de interacción más adecuados en la carretera.

"Apple compra pequeñas empresas con frecuencia, y no declaramos normalmente sobre el propósito de las mismas o los planes involucrados", confirmando Apple la adquisición a Financial Times.

VocalIQ es la segunda startup que puede ser herramienta para los futuros planes de Apple en la industria del automóvil. Adquirió Mapsense, una empresa dedicada a la analítica y visualización de mapas por $25 millones este verano.