Los discos RAM podríamos decir funcionan de modo opuesto a la famosa "memoria virtual". En esta nosotros utilizamos espacio en disco para que el sistema no se ahogue con determinadas aplicaciones. Comúnmente en Linux se la conoce como "swap" o "área de Intercambio". Aquí por el contrario nosotros tomamos una porción de nuestra memoria RAM y la convertimos en espacio en disco.
Es, por decirlo de algún modo, bastante similar en velocidad, a poseer un disco duro SSD. Esto implica que el acceso a datos es muy veloz. Es necesario aclarar que debemos disponer de una cantidad de memoria mas o menos aceptable para poder hacer uso de esta utilidad. De poco nos sirve crear un disco duro RAM si disponemos de 2GB. No obstante si contamos con 8 o 4 GB estamos en condiciones de poder gozar de sus beneficios.
¿Para qué sirven?
El primero y más conocido por todos es configurando los navegadores para que trabajen con dicho disco. Es de suponer que el rendimiento de los mismos se incrementara notablemente al hacerlo.
Para esto primero debemos hacernos con el software que nos permitirá crear dichos discos. Aquí voy a recomendar los que yo considero los mejores. En primer lugar se encuentra: AMD Radeon Ram Disk. Solo permite crear discos de hasta 4GB pero si lo compramos podemos crear más grandes aún.
DimmDrive es privado pero dice ser excelente para gamers. Posee un sistema de "Drag and Drop" que permite arrastrar cualquier juego del escritorio y comenzar a utilizar las prestaciones del programa.
Por el lado del software libre tenemos a DataRam e ImDisk los cuales también se jactan de poder ser usados en juegos, bases de datos, navegadores e incluso edición de audio y vídeo. Una vez que tengamos instalado cualquiera de los recomendados solo debemos especificar el tamaño, asignarle una letra, y presionar el botón: "Start RAMDisk".
Podremos verlo en el equipo justo con el resto de los discos, formatearlo escanearlo y por supuesto almacenar cosas en él. Veamos como podemos hacer uso entonces de estos discos para optimizar la cache de nuestros navegadores. Por el lado de Google Chrome deberemos hacer clic en el acceso directo que se encuentra en el escritorio y entrar en Propiedades. En el cuadro que indica el destino del navegador solo debemos añadir la siguiente línea:
--disk-cache-dir="X:/"
Siendo X la letra que le hayamos asignado a nuestro navegador.
En Mozilla Firefox solo debemos abrir el navegador y entrar en su configuración poniendo lo siguiente en la barra de exploración:
"about:config"
Luego procederemos a crear la siguiente clave:
"browser.cache.disk.parent_directory"
Esta clave tendrá como valor la letra que nosotros le asignamos a nuestra unidad RAM. En mi caso X:\
Por último buscamos entre las claves la que dice:
"browser.cache.disk.capacity"
Y le ponemos la cantidad de espacio a usar en bytes teniendo como referencia que 2GB son aproximadamente: 2147483648 KB. Pueden recurrir a esta maravillosa calculadora, poner el tamaño que deseen. Por lo demás solo deben apelar a sus necesidades y creatividad para darle un buen uso a su nuevo disco RAM. Posteriormente iremos ahondando con detalle en como podemos sacarle el jugo a esta herramienta.
