La resolución de pantalla siempre ha sido, históricamente, bien recibida como agua de mayo hasta hace bien poco, cuando comenzó el debate entre los entusiastas de la tecnología sobre su verdadera utilidad y sentido. Quería escribir acerca de esto tras conocer los rumores sobre el nuevo Note 5 y su supuesta pantalla 4K junto al drama que ha suscitado en Internet.
El drama comenzó con la salida de los primeros terminales 1440p, también conocidos coloquialmente como 2K, que contaban con unas densidades de pixeles hasta aquella fecha nunca vistas. Más nitidez de lo que muchos ojos podrían percibir. El problema es que los primeros smartphones en incluir una mayor resolución son los que, normalmente, sufren más debido al consumo extra de batería y el mayor rendimiento gráfico requerido para renderizar esa ingente cantidad de pixeles sin problema. Los usuarios detectaron peor autonomía y rendimiento que en sus predecesores. En los debates se usa este hecho para generalizar a favor de su argumento. Se equivocan, no es así siempre.
El otro argumento es el tan empleado por los "entusiastas": el "no es necesario". Y, aunque para una visión 20/20 superar los 320 ppi sea suficiente, todavía hay capacidad para que los ojos más dotados disciernan los pixeles individualmente. Para la mayoría de usuarios 1080p es suficiente, 1440p es demasiado. Yo, personalmente, estoy contento con cualquier densidad entre 300 y 400ppi (en paneles LCD, ahora veremos por qué en las AMOLED es diferente). Pero entiendo que haya diferencia, y que, por supuesto, más resolución nunca es peor si más resolución nunca es peor si no hay compromisos relacionados con el incremento
no hay compromisos relacionados con el incremento.
Hay smartphones con pantallas de 1440p que no solo no tienen problemas en autonomía o rendimiento, sino que superan a la mayoría de smartphones con paneles 1080p. Pero, tras conocerse que el Galaxy Note 5 tendría una pantalla 4K con una increíble densidad de 762ppi el debate se ha vuelto a abrir. ¿Por qué querría Samsung adoptar tan pronto una resolución tan grande?
Pantallas SAMOLED
Lo primero de todo, Samsung ya lleva meses trabajando en las pantallas 4K para dispositivos móviles. Más allá del conocido desarrollo, el camino recorrido desde la pantalla del Galaxy S al Galaxy S6 es, sencillamente, impresionante. Los paneles AMOLED han mejorado sustancialmente cada año pese a que hayan arrastrado multitud de quejas pese a su infinito contraste y bajo consumo:
Colores muy saturados.
Matriz pentile.
* Tintes de color según unidades determinadas.
Lo que pasa es que esto ha cambiado en gran parte. Desde el Note 3 la calibración de los paneles AMOLED de Samsung ha ido mejorando mucho, pero el problema que causa la matriz pentile continuaba. ¿Cómo se ha llegado a solucionar? Con más resolución. Las matrices pentiles omiten subpixeles ya que no afecta a la cantidad de luz emitida ni color de la imagen por las diferentes propiedades de cada luz de color. El problema es que si acercamos el ojo detectamos que faltan subpixeles, es muy percibible en pantallas de baja resolución. En el Galaxy Note 4 y, sobre todo, Galaxy S6 es imposible (para mí) percibir esta ausencia.
Las primeras AMOLED eran objetivamente peores que los paneles IPS en reproducción de color y brillo, pero en la actualidad los paneles Super AMOLED cuentan con una fidelidad y calibración fantástica.
A tener en cuenta. Es una falacia que un panel de menos resolución consuma menos, depende de la tecnología empleada. Buena muestra de ello es el gran brillo que tienen los últimos paneles, duplicando a las primeras AMOLED) sin que el consumo haya aumentado. Según DisplayMate está bajando cada año pese al incremento de resolución.
El panel del Galaxy Note 4 de 1440p consume menos que el panel 1080p del Galaxy Note 3. Es decir, primer argumento que desechar: un panel con mayor resolución no siempre consume más. Continuemos.
Rendimiento
Descartado el consumo del panel, alguien podría alegar la bajada de rendimiento por el aumento de pixeles o, incluso, el consumo extra de la GPU. Sigamos con Samsung como ejemplo e intentemos aclararlo.
Samsung es líder en el desarrollo y fabricación de semiconductores destinados al mercado mobile. Su mayor logro ha sido incluir el Exynos 7420 en detrimento del Qualcomm Snapdragon 810 por sus problemas de sobre calentamiento y thermal trottling. Es un SoC a la altura de los mejores. Por supuesto, como indican los benchmarks, no tiene problema alguno en mover una pantalla 1440p incluso en aplicaciones de renderizado 3D.
Aquí es donde creo que tiene sentido la pantalla 4K para Samsung: el Snapdragon 810 es incapaz de mover una pantalla 4K con soltura, y su sucesor, el Snapdragon 820, tendrá que esperar hasta el 2016 para poder ser empleado en producción. Si Samsung logra crear un Exynos con un rendimiento gráfico capaz de mover una pantalla 4K con la misma soltura que el Exynos 7420 mueve una 1440p, la surcoreana sería el primer fabricante en exclusiva en lograrlo. ¿Cómo? con su propia arquitectura de GPU.
Por supuesto esto son rumores y un análisis de las posibilidades. Pero dado el éxito del último Exynos y los rumores sobre las nuevas GPU, es más que probable que Samsung pueda ser el primer fabricante por lograrlo. ¿Por qué hacerlo? porque pueden. Es una demostración, es exclusividad, es una prueba de liderazgo.
4K llega al Gear VR
Una ventaja muy importante, la mayor, de aumentar la resolución de pantalla en el Note 5 sería su aplicación junto a unas gafas de realidad virtual. Pude probar el Gear VR y, aunque al igual que a mi compañero me gustase, echaba en falta más resolución. El ajuste focal de la lente hace que la densidad de pixeles de las pantallas actuales no sea suficiente. Una pantalla 4K sería pura épica para mis ojos, y es a donde tiene que avanzar la industria para que la realidad virtual pueda ser más "real".
Siendo los primeros en incluir una pantalla 4K, también serían los primeros en proveer a los entusiastas de unas gafas de realidad virtual con hasta 4 veces más pixeles que la competencia. Por lo tanto la pantalla 4K no solo puede que no tenga compromisos, sino que tendría una grandísima ventaja para un determinado uso en auge.
Concluyendo
Pese a que no todos los avances cambien drásticamente nuestra experiencia en el uso, si estos no afectan o comprometen la experiencia global del terminal deberían ser bienvenidos. Yo fui el primero en criticar las pantallas de alta densidad, pero lo hice cuando el hardware no estaba preparado para ello y los paneles eran IPS.
En las pantallas PenTile, si tenemos en cuenta la matriz de pixeles no ha sido hasta el Galaxy S6 cuando hemos tenido una densidad realmente alta. En pantallas cercanas a las 6" una pantalla 4K, en matrices PenTile, tiene mucho sentido para que no se perciba la falta de subpixeles o esos blancos "sucios" por falta de subpixeles. En una pantalla LCD estoy de acuerdo que sobrepasar los 400ppi de densidad no tiene una clara y discernible mejoría. En paneles Super AMOLED con matriz PenTile sí. Y es esta la tecnología que avanza más en eficiencia cada años, es donde más sentido tiene.
Por último tenemos el símbolo de estatus que daría poder lograr un SoC a la altura y uno de los mejores kit de VR del mercado. El 4K no será la mayor ventaja de los nuevos terminales, pero tampoco será el gran compromiso que algunos todavía creen.
Aunque en el artículo me haya centrado en la resolución, eficiencia y matriz de los paneles considero que la mejor calidad de imagen no la da una resolución alta, sino un contraste elevado, un brillo suficiente para que sea legible bajo la luz del sol, una gran fidelidad y un gamma y temperatura de color ajustado al estándar.
Que se perciba diferencia con densidades tan altas en matrices PenTile no quiere decir que se perciba en paneles LCD.
* Ya que he escrito mucho sobre las Super AMOLED os recomiendo que si tenéis un Galaxy S o Galaxy Note de última generación pongáis el modo básico de pantalla para la mayor fidelidad de color.