Desde hace dos días no para de caer basura sobre el tejado de Lenovo, y en cierto modo se lo tienen merecido, porque preinstalar adware como ellos han hecho con Superfish (sea con el fin que sea) es algo muy grave, y que desde luego, supondrá un punto de inflexión en la confianza de los usuarios hacia la compañía china. Como hemos visto hoy, incluso la propia Microsoft ha lanzado una actualización de la base de datos para eliminar Superfish y todos los restos que pudiera dejar en los certificados SSL vulnerados.
Las consecuencias para Lenovo serán grandísimas, tras vulnerar la confianza de millones de usuarios
Tras ver la gravedad de la situación, el gobierno de los Estados Unidos ha pedido a Lenovo que elimine Superfish de todos sus portátiles, a lo que Lenovo ha respondido lanzando una herramienta para eliminar Superfish por completo, según informa TechCrunch. Hay que recordar que Superfish no sólo vulnera la privacidad del usuario, sino que abre la puerta a que cualquier ordenador que lo incorpore pueda ser fácilmente atacado. Sin restar gravedad al asunto, es necesario recordar que Lenovo dejó de preinstalar Superfish en enero, por lo que ordenadores comprados ahora (producidos desde una fecha posterior), ya no lo incluyen.
Creo que todo esto nos deja varias lecciones. La primera, que es de la que Lenovo tiene que aprender, es la necesidad que siempre existe de ser totalmente transparentes como empresa, pues con un simple hecho como este puede hundirse la reputación generada tras tantos años de éxitos y de grandes soluciones de IBM (que vendió su división de computadoras a Lenovo), y es que su línea ThinkPad aún es de las más valoradas en el mercado empresarial. La segunda es que la seguridad en Internet no es ya un tema baladí, no. De hecho, se trata de los asuntos que más preocupan, y casos como los de la NSA no hacen sino aumentar el esfuerzo de los usuarios por mantener la privacidad, como se ha visto en las alternativas que han ido surgiendo para eliminar Superfish.
Nuestra recomendación, desde aquí, es comprar portátiles Windows con la menor cantidad de crapware posible, es decir, la gama Nexus de Microsoft.