Suena a contrariedad, sin dudas. El plan de ajuste que Elon Musk inició en Twitter está llevando a la red social a acumular deudas que, en algunos casos, son millonarias. Así lo afirma un informe de The New York Times, que revela que el magnate ha ordenado que su nueva compañía suspenda los pagos por servicios ya recibidos, entre otras medidas controversiales.

El recorte de gastos que Twitter ha iniciado en las últimas semanas ha llevado a atacar varios frentes. El más polémico, con distancia, ha sido el de la reducción de personal. Pero la firma con base en San Francisco, California, también ha puesto la lupa sobre los costes de infraestructura informática, servicios de software, traslados de personal, bienes raíces y cafetería.

Pero pasar la tijera en tantos ámbitos no es tarea sencilla, ni siquiera para Elon Musk. Por ello, el empresario ha recurrido a algunos de sus principales laderos, a quienes ha "reclutado" desde Tesla y The Boring Company. Según el citado informe, la orden del nuevo mandamás de la red social es una sola: cortar, cortar y cortar.

En tal sentido, el magnate habría dictaminado que el área de finanzas de Twitter reduzca el ritmo de pagos, o que, directamente, suspenda las transferencias de dinero a proveedores y contratistas de servicios. El problema está en que muchos de los servicios por los que la compañía no está pagando ya han sido recibidos. Por ende, el atraso en los desembolsos está despertando quejas tanto internas como externas.

Elon Musk y su agresivo plan para recortar gastos en Twitter

Elon Musk, Twitter, Jeff Bezos.

Según NYT, las deudas que Twitter acumula van, en algunos casos, desde los cientos de miles hasta los millones de dólares. Una de las aristas más afectadas por la decisión de Elon Musk es la de transporte, puesto que el empresario se ha negado a pagar los servicios de traslados que utilizaban los anteriores directivos de la empresa, cuando todavía era liderada por Parag Agrawal.

Otro apartado donde el CEO de Tesla y SpaceX quiere dejar de gastar es en el de bienes raíces. Actualmente, Twitter renta oficinas en distintas partes del mundo. Pero los recientes despidos, le permitirían prescindir de algunos de los espacios físicos que actualmente se consideran un desperdicio de dinero.

Pero la cosa no termina allí. Elon Musk pretende que sean los propios empleados de Twitter quienes renegocien los actuales acuerdos con firmas que proveen servicios tecnológicos, como Oracle y Amazon. Al punto tal de instruirlos para que amenacen con cortar los lazos de forma permanente si se niegan a bajar sus precios. Un dato especialmente llamativo, considerando que Larry Ellison, fundador de Oracle, fue uno de los principales inversores de Elon Musk para comprar la red social.

No obstante, el panorama puede que no sea del todo favorable para la firma californiana. El informe menciona que el acuerdo con uno de sus proveedores de software venció recientemente, ya bajo el mando de Musk, y que, al no lograr un acuerdo para renovarlo, Twitter perdió un descuento especial que le habían otorgado.

Adiós a las tarjetas corporativas

Más allá de las quejas externas por los pagos atrasados, son los propios empleados de Twitter quienes más están sintiendo el recorte de gastos. En las últimas semanas no solo han perdido el acceso a comidas gratuitas en las cafeterías de la empresa, sino también beneficios adicionales como descuentos en telefonía e internet, y en servicios de cuidados infantiles.

Pero hay algo que grafica todavía más claro cómo se ve internamente el plan de austeridad de Elon Musk. La semana pasada, cuando el empresario convocó a los ingenieros a una reunión de emergencia, instó a todos aquellos que no estuvieran en San Francisco a tomar un avión para sumarse en persona a la reunión. Sin embargo, con la cancelación de las tarjetas de crédito corporativas, muchos de ellos dudaron en comprar los pasajes con su propio dinero, por temor a que no les sea reembolsado.

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