A la espera de su publicación en el Boletín Oficial de Estado que lo haga completamente oficial y aporte todos los detalles y condiciones, el IVA de los libros electrónicos ya se sitúa oficialmente en el 4%, bajando de su ya sabido 21%.
Esta medida realmente no es una sorpresa dentro de la situación de emergencia por la crisis sanitaria por el coronavirus. Hace poco más de una semana que el Gobierno anunciaba que tomaría esta decisión en un corto espacio de tiempo. Quedaba saber cuándo se haría efectiva. De hecho, no todos estaban confiados de que finalmente esta se llevase a cabo. En un momento en el que el gasto del Estado se ha incrementado para cubrir la emergencia sanitaria y social, mientras que los ingresos merman por la inactividad económica no estaba del todo claro que el impuesto a los libros electrónicos se fuese a reducir en un corto periodo de tiempo. De hecho, con esta medida, el Estado dejará de percibir 24 millones de euros aproximadamente.
Hay sido hoy martes, en el Consejo de Ministros celebrado en Moncloa, cuando la vicepreseinta económica del Gobierno, Nadia Calviño, ha anunciado la reducción del IVA. De esta manera, los libros electrónicos pasan a formar parte de la familia de productos con imposición superreducida. Asímismo, esta medida se aplica a la prensa digital y las revistas digitales con suscripción; de esta manera se equiparan a la prensa y libros en papel con una consecuente reducción de su precio con la que pretenden incentivar su uso.
Sería una continuación a las ayudas que el Gobierno ha otorgado a las grandes compañías de medios, en este caso enfocado a otros medios que han visto mermados sus ingresos a causa de la caída de los volúmenes de publicidad por el coronavirus.
Esta medida, que es una de las peticiones con más trayectoria en el mundo de la cultura bajo la idea de que esta medida les permitirá competir en igualdad de condiciones. Además, formaba parte del pacto entre PSOE y Unidas Podemos firmado a principios de año con la intención de cumplir una de las directrices de la Unión Europea en materia fiscal para la cultura.