México es el primer país que estrena una Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera (Fintech). Tras ser publicada el pasado 9 de marzo en el Diario Oficial de la Federación, lo que sigue es el desarrollo de las leyes secundarias que la acompañarán y detallarán. ¿Pero de qué manera regulará el mundo de las criptomonedas? Aquí lo vamos a explicar a detalle.
La Ley Fintech no se mete de forma directa con las criptomonedas, sino con aquellas instituciones que las operan. A nivel general, aborda cuatro rubros del sistema financiero del país: los activos virtuales (como las monedas digitales), la asesoría financiera, el fondeo colectivo (crowdfunding) y los pagos electrónicos. En las finanzas digitales, ha introducido nuevos elementos como una definición de un activo virtual y quiénes pueden manejarlos.
En el artículo 30, la Ley Fintech mexicana define un activo virtual como:
> (…) se considera activo virtual la representación de valor registrada electrónicamente y utilizada entre el público como medio de pago para todo tipo de actos jurídicos y cuya transferencia únicamente puede llevarse a cabo a través de medios electrónicos.
Eduardo Guraieb, director general de Fintech México, una asociación civil que agrupa a las empresas más importantes del sector Fintech en el país, recalcó en entrevista con Hipertextual que "solamente regula el uso de los activos virtuales por parte de las Instituciones de Tecnología Financiera, que son las Fintech, y las instituciones de crédito, que son los bancos", es decir, no regula el uso de criptoactivos entre particulares.
Por otro lado, el Banco de México (Banxico) es el que ha sido establecido en la Ley Fintech como el organismo tutelar de las casas de cambio de criptoactivos, quienes tendrán que solicitar una licencia para operar como tal, y quien autorice a las criptodivisas en su lista de activos virtuales. Las casas de cambio de activos virtuales, para efectos de la ley, son Instituciones de Tecnología Financiera, explicó Guraieb, quien es licenciado en Derecho egresado del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
Las casas de cambio están en la obligación de brindar información a sus clientes sobre los riesgos que implican las operaciones, la volatilidad del valor de los activos y los riesgos tecnológicos, cibernéticos y de fraude inherentes.
Además, deben estar en la posibilidad de entregar "al cliente, cuando lo solicite, la cantidad de activos virtuales de que este sea titular, o bien, el monto en moneda nacional correspondiente al pago recibido de la enajenación de los activos virtuales que corresponda".
En cuanto a infracciones, el artículo 124 de la Ley Fintech señala que realizar actividades con activos virtuales no autorizados por Banxico o sin tener la licencia correspondiente podrá ser sancionado con una pena de prisión de siete y hasta 15 años y una multa de 5.000 a 150.000 UMA (Unidad de Medida y Actualización). En 2018, la UMA diaria equivale a 80.60 pesos, es decir, la multa podría ir de 403.000 a 12.090.000 pesos.
"La gente no piensa en Bitcoin"
Que México tenga la primera Ley Fintech en el mundo no significa que ya mañana todos en el país van a salir de sus casas y usar criptomonedas para comprar cualquier cosa como un café en la calle. Por el contrario, hay mucho camino que recorrer antes de llegar a ese punto. Para empezar, es el mismo motivo por el que la mayoría de las monedas digitales no cumplirán un requisito fundamental: ser usada como medio de pago.
Como señaló Jorge Ortiz, socio director de The Fintech Hub, en entrevista con Hipertextual, se está contemplando a las criptomonedas dentro de la ley, sin embargo, no se les está dando el reconocimiento de moneda, sino de activo.
Entre las características de una moneda, además de servir como unidad de valor, es que se usan como una reserva de valor o vehículo de valor, explicó Ortiz, quien fue socio y primer presidente de la Asociación Mexicana de Empresas Fintech. Adicionalmente, si bien todas las monedas tienen cierta volatilidad, destacó el licenciado en Contaduría y Finanzas de la UDLAP, las criptomonedas son de los activos que más volatilidad tienen.
> Curiosamente, la gente no está utilizando el Bitcoin como moneda, como vehículo de valor, como unidad de valor. La está utilizando para especular y se quieren volver ricos de la noche a la mañana. Ese es el problema, no le están dando usabilidad o la usabilidad que le deberían de dar como a cualquier moneda.
Y eso se debe a que la mayoría de "la gente no piensa en Bitcoin", señaló Ortiz, quien tiene la teoría de que en el fondo las personas no quieren pagar en Bitcoin, y es porque no lo ven aún como un medio de pago como el euro, el peso o el dólar, sino como un vehículo de valor para especular con la esperanza de ganar. Por tal motivo, él considera un acierto que las autoridades en esta etapa no hayan reconocido a las criptomonedas como moneda.
Más adelante, en las leyes secundarias se van a detallar las características que Banxico tomará en cuenta como la usabilidad de una criptodivisa, su criptografía o aceptación a nivel internacional para considerarla dentro de su lista de activos digitales.
Las leyes secundarias
La Ley Fintech aprobada es muy general. Por tal razón, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el Banco de México, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros deberán trabajar en el diseño de las leyes secundarias donde se especifique cuál será la operación, vigilancia y actuación de las empresas de tecnología financiera.
Tanto Guraieb como Ortiz coinciden en que todos los involucrados del sector en el proceso de desarrollo de la Ley Fintech buscaban que fuera bastante general, pues, como señalan ambos, siempre es más fácil modificar un reglamento que una ley.
Entre los detalles que establecerán las leyes secundarias se encuentran las características que deben reunir los activos virtuales para ser avalados por Banxico en su lista. También qué ocurrirá en el caso de que una bifurcación que de como resultado dos activos virtuales distintos, es decir, cómo será la revisión de la nueva y la antigua criptodivisa o activo.
Asimismo, otros temas que se van a tratar son la seguridad, cómo se define el manual de riesgos operativos dentro de las empresas, así como la de prevención de lavado de dinero y fraude, señaló Ortíz. Sin embargo, a la vez deben cuidar que la barrera que establezcan no sea lo suficientemente alta como para "inhibir la innovación o la entrada de nuevos jugadores", destacó el especialista en finanzas.
¿Cuál fue el gran paso para las criptomonedas en México?
Si bien en otros lugares como Reino Unido hay una regulación en cuanto a temas Fintech, no existe ninguna otra ley como la mexicana. "Y tiene conceptos innovadores que no están en jurisdicciones que están más avanzadas en términos económicos", señaló Guraieb.
"Aunque sea indirecta, regula a los activos virtuales al determinar con cuáles pueden operar las casas de cambio, es decir, a cuáles tenemos acceso los particulares a cambio de pesos", explicó el especialista en leyes, y añadió:
> Lo que quiere hacer esto es entrar de cierta manera y reconocer que existen monedas virtuales o activos virtuales con un trasfondo técnico muy serio y con un producto muy sustentable o, a la vez, que quizá todavía hay algunos proyectos que son muy incipientes o que no tienen usos tan seguros.
Por otro lado, para Ortiz ha sido muy importante la apertura que han tenido las autoridades para escuchar al sector durante el desarrollo de la ley. De hecho, destacó, los senadores la aprobaron de forma unánime y entre los diputados solo hubo tres votos en contra. "Eso te habla de cómo fue la apreciación de esta ley".
Además, el economista considera que el contar con una regulación vanguardista como esta atraerá a talento de otras partes de Latinoamérica. Ambos especialistas coinciden en el motivo: la Ley Fintech es innovadora porque permite dar a los empresarios certeza jurídica. Al final, se espera que eso también propicie una mayor inversión hacia las Fintech en el país y, en el mejor de las casos, que México se convierta la capital Fintech latinoamericana, concluyó Ortiz.