Durante estos días he estado jugando con algunos smartphones, entre ellos el LG Arena KM900 y por otro lado un HTC Magic. Del primero hice una extensa reseña en Gizmóvil, es un teléfono con un hardware impresionante, de lo mejor disponible en el mercado, pero con un sistema operativo que no logra aprovechar los fierros del aparato y una interfaz gráfica francamente decepcionante. Del HTC Magic estaremos publicando un review a detalle pronto, pero de lo más interesante que tiene es el sistema operativo: Android 1.5 (Cupcake) de Google.
Yo entiendo que LG está haciendo un esfuerzo grande por competir y producir teléfonos de buena calidad, competitivos, que no se rayen a la mínima provocación, con componentes de muy alta calidad, pero también entiendo que es una empresa de hardware, no de software y por lo tanto los dos teléfonos que he reseñado de la marca han tenido exactamente el mismo problema.
Android podría ser una solución
Android es un sistema operativo que me ha sorprendido gratamente, es rápido, tiene un diseño de interfaz gráfica bueno, aprovecha, como debe ser, los componentes de la máquina donde está instalado, soporta dispositivos con pantalla táctil, con teclado físico, tiene desarrollo constante, está soportado por Google y es open source.
Esa podría ser la solución: que LG siga haciendo lo que mejor sabe hacer: hardware y que deriven el desarrollo de software a Android. De hecho me encantaría que en algún momento la marca permita la instalación del sistema operativo por medio de una actualización de firmware, con esa pantalla de 480×800, con el procesador, esa cámara y memoria, podría convertirse en un teléfono casi perfecto.
¿Sucederá?