Desde sus inicios, Disney ha dedicado una buena cantidad de sus producciones al género de la fantasía. No solo porque es el más próximo al público infantil, el más cercano a la sensibilidad del estudio. También, porque buena parte de las grandes historias que hicieron famosa a la compañía, proceden del ámbito de la imaginación y de los clásicos relatos tradicionales. El resultado es una colección de cintas, que enaltecen la importancia de los cuentos de hadas y a la vez, recrear un punto de vista emocionante y sensible, acerca de sus argumentos.
Con el correr de las décadas, Disney ha evolucionado en propuesta y punto de vista. Lo que se ha mantenido intacto, es su dedicación a narraciones fantásticas de toda índole y en especial, las que celebran la bondad y el poder de la voluntad. De los grandes animados que hicieron famoso a la empresa, hasta los actuales live action, fuente de ocasional polémica y debate. Lo cierto es que el estudio creció en ambición pero, a la vez, en la forma de profundizar en su perspectiva acerca de valores e ideales. En la actualidad, en medio de las inevitables discusiones sobre su permanencia y legado, su perspectiva continúa siendo una. La de construir un mundo en que la fantasía tenga un lugar.
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Para celebrar lo anterior, te dejamos cinco recomendaciones de contenido fantástico que puedes ver ahora mismo en Disney+. De la reinvención de un clásico para un púbico nuevo a una reinvención de un relato amado por generaciones. La selección narra la historia de la compañía, así como sus inquietudes y grandes hallazgos narrativos. El punto más destacable de una evolución argumental que sorprende en la actualidad.
La bella y la bestia
El director Bill Condon tomó al clásico animado de 1991 y lo convirtió en una película de fantasía de acción real de enorme calidad y corazón. La figura de Bella (Emma Watson) también recibió una necesaria actualización.
Aunque en su versión de carne y hueso continúa siendo una chica en busca de un propósito mayor en su vida, ahora sus aspiraciones están más cercanas a su mundo intelectual. Por lo que esta joven mujer, llena de preguntas y curiosidad, desea recorrer el mundo para encontrar su lugar en él. A la vez, para satisfacer su sed de conocimiento.
Al otro lado, Bestia (Dan Stevens) sufre una condena que podría ser eterna debido a su arrogancia y vanidad. El otrora príncipe de un reino acaudalado, es una criatura que pasa sus días en el encierro de un castillo congelado en el tiempo. Por lo que la llegada de Bella, no solo cambiará su perspectiva acerca del mundo y el destino. A la vez, conmoverá su corazón y le demostrará que la magia puede ser una forma de redención.
Convertido en un éxito de taquilla y de crítica, el musical es ahora parte del contenido de fantasía predilecto de buena parte de los suscriptores de Disney+. Todo un logro que deja claro que la evolución del estudio recorre nuevos caminos para homenajear a sus historias más queridas.
La Sirenita
La cinta de Rob Marshall estuvo precedida por la polémica. De los cambios que modificaban sustancialmente el tono y ritmo de la trama, hasta la selección de Halle Bailey como Ariel. La producción tuvo que enfrentarse a todo tipo de escollos e inconvenientes. Mucho más, cuando el animado de 1989, del cual procede, es uno de los favoritos de Disney+. No solo por considerarse el éxito que revitalizó al estudio. A la vez, por ser una de las adaptaciones más entrañables llegadas a la pantalla grande del cuento de hadas de Hans Christian Andersen.
Pero el estreno de la cinta, disipó las dudas del público. Con algunos cambios que modernizaron la relación de Ariel con su padre Tritón (Javier Bardem), la película emocionó a los fanáticos y al público en general. A la vez, mostró todas las posibilidades de narrar una historia conocida y amada, bajo un nuevo punto de vista y dirigida a un nuevo público.
La obra de Marshall es tanto un tributo a la película de la cual procede como una muestra de un futuro con nuevas princesas, dueñas de sus propias vidas. Un anuncio optimista que deja claro que Disney es capaz de respetar su universo y al mismo tiempo, de crecer en inéditas direcciones.
Willow, en la tierra del encanto
En el año 1988, Ron Howard dirigió un clásico discreto que, con los años, se ha convertido en una de las cintas de fantasía más queridas del cine. En especial, por lograr mezclar en un mismo escenario magia, un destino predestinado y la búsqueda de la redención. Todo en un trayecto que atravesaba una tierra mágica y desconocida, en compañía de un encantador grupo de personajes.
Es probable que Willow, en la tierra del encanto, no sea en especial original. Tampoco, una historia que sorprenda en sus puntos más emocionantes. Pero lo que puede negarse es que es encantadora, en su capacidad de usar el humor y la sensibilidad para contar un relato familiar. Más allá de princesas y reinos encantados, el argumento explora en la amistad y el amor, desde puntos de vista novedosos.
Prueba de su permanencia, es la serie con una única temporada que Disney+ estrenó en el 2022. No solo recupera los personajes, sino que agrega unos cuantos a la mitología del argumento. Toda una visión de un mundo rico que todavía tiene mucho que contar.
Saga 'Encantada'
En 2007, Giselle (Amy Adams) viajó desde el reino de Andalasia hasta Nueva York en busca del amor verdadero. Y lo encontró. El muy descreído abogado de divorcios, Robert Phillip (Patrick Dempsey), se convirtió en el gran héroe de la historia. A la vez, en el hombre que dio a Giselle el beso del verdadero amor. Dirigida por Kevin Lima se convirtió en un éxito de taquilla, además de la favorita de toda una generación en busca de nuevas princesas.
En 2022, el recorrido de Giselle continuó. Esta vez, como madre de dos y esposa amantísima, tuvo que enfrentarse no a una suegra malvada, sino al desencanto amoroso. Y aunque la película Desencantada: Vuelve Giselle de Adam Shankman no tuvo el mismo impacto que la original, sí logro conmover a la audiencia. Y dejó claro que la princesa que luchó contra dragones, ahora tendría que luchar para encontrar su lugar en el mundo. Lo que logró, por supuesto, con un toque de magia y amor.
La cenicienta
El realizador británico Kenneth Branagh tomó el conocido cuento de La cenicienta y lo convirtió en una espléndida cinta de fantasía que deslumbró.
Protagonizada por la actriz Lily James en un papel hecho a su medida, el relato de la chica, con el pie más pequeño del reino, se transforma en una espléndida historia de amor. También, en una reflexión acerca del amor — romántico y, por otro lado, el paternal — que logra conmover por su sincera ingenuidad.
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Y aunque el final es conocido por todos, Branagh logró que fuera un espectáculo de luz y color que emocionó a la audiencia. Un obsequio para los nostálgicos y también para un público más contemporáneo, amante de la fantasía.