El cine, además de un arte completísimo con la posibilidad cierta de satisfacernos mucho, es un gran negocio. Por ese motivo, la industria invierte tantos millones de dólares y de euros para la realización de largometrajes y series televisivas y en sus campañas de publicidad, y se elaboran rankings de recaudación en taquilla en el mundo entero. Y, gracias a los mismos, podemos saber quiénes son los directores cuyas películas han conseguido que más espectadores ansiosos se sienten a disfrutar del espectáculo en las salas de proyección comerciales. La mayoría, efectivamente, son de Hollywood.
Por los más de 10.500 millones de dólares obtenidos con los treinta y seis filmes en los que ha participado como realizador, Steven Spielberg es el número uno, y Parque Jurásico (1993), ET, el extraterrestre (1982) e Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal (2008), sus tres obras más taquilleras. En el segundo puesto tenemos a los hermanos Joe y Anthony Russo con más de 6.800 millones ingresados y Avengers: Endgame (2019), Infinity War (2018) y Capitán América: Civil War (2016) como sus filmes de mayor recaudación entre los siete que han dirigido.
Les siguen los más de 6.500 millones ganados por los catorce de Peter Jackson, con El Señor de los Anillos: El retorno del rey (2003), El Hobbit: Un viaje inesperado (2012) y La desolación de Smaug (2013) como los más beneficiosos, por gentileza de J. R. R. Tolkien. Después y con más de 6.400 millones, destaca Michael Bay y sus quince películas, de las que Transformers: El lado oscuro de la Luna (2011), La era de la extinción (2014) y La venganza de los caídos (2009) son las más exitosas, las tres de la misma saga. Y los más de 6.200 millones de James Cameron con catorce largometrajes, y Avatar (2009), Titanic (1997) y Terminator 2: El juicio final (1991) en lo alto de la cantidad de su dinero embolsado.
Los más de 5.900 millones que los ocho filmes de David Yates han recaudado le sitúan a continuación, con Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, parte 2 (2011), la Parte 1 (2010) y La Orden del Fénix (2007) como los suyos más taquilleros, los tres sobre el famoso mago británico. A bastante distancia se encuentran los más de 4.900 millones de las doce películas de Christopher Nolan, entre las que sobresalen El caballero oscuro: La leyenda renace (2012), la entrega previa de su trilogía (2008) y Origen (2010). Y los más de 4.600 millones de los seis largos de J. J. Abrams le colocan a continuación, con Star Wars: The Force Awakens (2015), El ascenso de Skywalker (2019) y Star Trek: En la oscuridad (2013) como su tríada mayor.
Los diecinueve filmes de Tim Burton han logrado más de 4.400 millones, y Alicia en el País de las Maravillas (2010), Charlie y la fábrica de chocolate (2005) y Batman (1989) son los que le han reportado los triunfos más significativos en los cines. Los veintidós de Robert Zemeckis, por otra parte, se han hecho con más de 4.300 millones, y Forrest Gump (1994), Náufrago (2000) y Regreso al futuro (1985) están a la cabeza en la pasta gansa alcanzada. Y los nueve de Jon Favreau les rondan con algo más de los mismos 4.300 millones, y El rey león (2019), El Libro de la Selva (2016) y Iron Man 2 (2010) se suben a su propio podio.
Igual que los treinta y tres de Ron Howard, que ha atraído a más gente a las salas de todo el mundo con El Código Da Vinci (2006), Ángeles y demonios (2009), dos de los protagonizados por el profesor Robert Langdon (Tom Hanks), y Han Solo: Una historia de Star Wars (2018). Los veintinueve en los que está acreditado Ridley Scott superan los 4.200 millones, con Marte (2015), Gladiator (2000) y Prometheus (2012) como los de mayor prosperidad. Y los dieciséis de Chris Columbus han llegado a más de 4.000 millones de recaudación, sobre todo a causa de Harry Potter y la Piedra Filosofal (2001), La cámara secreta (2002) y Solo en casa (1990).
Más de 3.900 millones se los debe la industria a las quince películas de Roland Emmerich, en especial por Independence Day (1996), 2012 (2009) y El día de mañana (2004); más de 3.700 millones, a las diez de Bryan Singer, que lo petó en taquilla, sobre todo, con Bohemian Rhapsody (2018), X-Men: Días del futuro pasado (2014) y Apocalipsis (2016); algo menos, a las cuatro de Pierre Coffin, cuyos mejores exhibiciones empiezan por Minions (2015), Gru, mi villano favorito 3 (2017), ambas codirigidas por Kyle Balda, y la parte anterior a esta última (2013); y Gru, mi villano favorito (2010) es la que se le seguiría, por supuesto.
Los once largometrajes de Gore Verbinski han amasado más de 3.600 millones, en buena medida debido al capitán Jack Sparrow (Johnny Depp) y su tripulación en Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto (2006), En el fin del mundo (2007) y La maldición de la Perla Negra (2003). Y unos cuantos milloncejos menos pero más de la misma suma, los nueve de James Wan, el vigésimo director entre los más taquilleros de la historia, que pudo coronándose en las salas con Fast and Furious 7 (2015), Aquaman (2018) y Expediente Warren: The Conjuring (2013), a pesar de que su secuela, El caso Endfield (2016), merecía un mayor predicamento y no se le impuso aunque se quedó cerca.