El estreno en España de A Complete Unknown por fin ha llegado. El biopic de Bob Dylan protagonizado por Timothée Chalamet se estrenó en EE. UU. el pasado mes de diciembre. Sin embargo, la cinta ha tardado algo más en llegar a otros mercados. Eso sí, lo hace con el interés añadido de sus ocho nominaciones a los Premios Oscar 2025. Entre los galardones opta a Mejor Película, a Mejor Dirección para James Mangold y a Mejor Actor para el propio Chalamet, que de hecho se postula como uno de los grandes favoritos.
La historia de A Complete Unknown narra los primeros años de la carrera de Bob Dylan. En la Nueva York de principios de los años 60, con una vibrante escena musical y una convulsa vida cultural como telón de fondo, llega un enigmático joven de 19 años. Procede de Minnesota y llega al West Village únicamente con su guitarra y un talento revolucionario. Lo que entonces no sabía es que estaba destinado a cambiar el curso de la música estadounidense para siempre. Rápidamente asciende a la fama, negándose a ser definido y, al final, tomando una decisión controvertida que repercutiría culturalmente en todo el mundo.
A Complete Unknown
Nominada a 8 Premios Oscar, A Complete Unknown explora los primeros años de carrera de Bob Dylan con un brillante y camaleónico Timothée Chalamet como protagonista. Una cinta que indaga en el ascenso a la fama, el espíritu de rebeldía y los claroscuros de un cantautor que se convertiría en leyenda.
Biopic al uso
En realidad, A Complete Unknown sigue la tendencia de Hollywood de hace avrios años de darle un biopic a alguna estrella de la música. Si lo han tenido artistas y grupos de la talla de Queen, Elton John, Elvis o Robbie Williams -además de las futuras cintas de Michael Jackson y The Beatles- no había razón para que Bob Dylan no tuviera uno. Para ello, se han hecho con un director que ya demostró saber aproximarse a este tipo de historias con En la cuerda floja.
Precisamente, como curiosidad, en A Complete Unknown James Mangold recupera brevemente a Johnny Cash, ya que coincidió con Dylan en más de una ocasión en aquella época. Para A Complete Unknown, en cualquier caso, el driector ha optado por seguir los estándares del género. No es una película revolucionaria o particularmente original. Simplemente sigue los vaivenes de su joven protagonista de una manera correcta y eficaz, sin excentricidades.
Esto convierte a A Complete Unknown, por tanto, en el estreno ideal para los fans de Dylan. Los acólitos del cantautor disfrutarán enormemente de esta revisión de su historia. Vibrarán con cada canción, se emocionarán con el proceso creativo de composición de su protagonista y vivirán intensamente sus dramas más personales. El resto de espectadores tampoco se aburrirán, aunque en ellos la película no dejará un poso tan profundo.
Sin miedo a las sombras
Quizá lo más interesante de A Complete Unknown sea el enfoque de James Mangold y Jay Cocks hacia su protagonista desde el guion. Lo fácil en un biopic, y más si detrás se encuentra el propio artista -como es el caso-, es mostrar su lado más amable. Cualquier película del género trata de desentrañar las claves que convierten a las personas con talento en leyendas inolvidables de la sociedad moderna.
Evidentemente, Mangold y Cocks buscan esas respuestas. Pero lo hacen sin miedo a mostrar la arrogancia de Dylan. El protagonista de A Complete Unknown no es perfecto. Tiene momentos de lucidez y de oscurantismo a partes iguales. Es engreído, orgulloso, infiel y tiene muchas contradicciones. Y la película lo muestra abiertamente sin ánimo de juzgarle. No se pretende una enseñanza moralista sino, sencillamente, mostrarle como un ser humano, con sus cosas buenas y sus cosas malas.
Thimothée Chalamet se consagra (otra vez)
Para poder llevar a cabo todo esto es necesario tener a un actor a la altura del mito al que debe dar vida en pantalla. Por fortuna, Mangold no podía haber elegido mejor. Timothée Chalamet lleva ya muchos años en la industria y en cada papel parece crecer más y más. Despuntó en Call me by your name, se hizo un nombre a las órdenes de directores como Woody Allen, Greta Gerwig, Wes Anderson o Adam McKay y se convirtió en el actor de moda con blockbusters como Dune y Wonka.
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Pero lo que le caracteriza en todos esos proyectos es que tiene una capacidad camaleónica innata escandalosa. Se ha convertido por pleno derecho en uno de los mejores actores de su generación y con A Complete Unknown vuelve a elevar su techo, que parece no tener límite. La interpretación que hace de este Bob Dylan joven es prodigiosa. Se mimetiza a la perfección con el artista hasta el punto de cantar sus canciones más legendarias con muchísimo acierto. Cada gesto, cada palabra y cada frase sin vocalizar al más puro estilo Dylan reviven una juventud que quedó atrás hace muchos años para el Premio Nobel de Literatura.
Junto a él, también brillan sus principales acompañantes. Monica Barbaro y Elle Fanning dan vida a las dos parejas de Dylan en A Complete Unknown. La primera, hipnótica en su papel, también revive con enorme talento y entusiasmo la juventud de la cantautora Joan Baez. Por su parte, Fanning interpreta a una mujer ficcionada, Sylvie Russo, un rol que no le permite brillar tanto como a sus compañeros, si bien con lo poco que tiene logra generar una profunda empatía en el espectador, mucha más que cualquier otro personaje de la película. Y, por supuesto, hay que hablar de Edward Norton como Pete Seeger en un papel secundario entrañable que le ha valido la nominación a los Premios Oscar.
En definitiva, A Complete Unknown es un biopic correcto y estandarizado que se eleva por las portentosas interpretaciones de sus protagonistas. Chalamet demuestra que sigue creciendo cada año que pasa y que ya es uno de los mejores actores de todo Hollywood antes siquiera de haber cumplido los 30 años. Había muchas ganas por ver a su Dylan y el intérprete no ha defraudado en absoluto.
