5 películas de ciencia ficción épica para celebrar el estreno de ‘Dune: parte 2’

Dune: parte 2 hace algo más que completar la experiencia de su predecesora, estrenada en el año 2021. También, explora un escenario mucho más ambicioso, mejor construida y sin duda, mejor narrado que la primera parte de la historia imaginada por Frank Herbert. Denis Villeneuve convirtió la batalla de Paul Atreides (Timothée Chalamet) por vengar la muerte de su padre y reivindicar su memoria, en el recorrido por un universo rico en detalles y una de las mejores películas de ciencia ficción.

A la vez, profundizó en una reflexión detallada acerca del sentido del propósito, la predestinación y el destino heroico. Todo, en un escenario de ciencia ficción con tintes épicos. Asimismo, en medio de la promesa de una tercera parte que además de concluir la historia de los Atreides, permitirá comprender el futuro del universo, tal y como lo propone el relato.

Por supuesto, Dune — tanto la saga literaria como su versión cinematográfica — es un recorrido a través de los terrenos del género llevados a un nivel existencialista. A la vez, a una serie de interrogantes acerca de la vida, el amor y el tiempo. Lo que le convierte en el mejor ejemplo de un relato que construye su propia mitología.

Para celebrar el estreno de Dune 2 y en particular, la visión de Denis Villeneuve sobre las grandes historias, te dejamos cinco películas que celebran la ciencia ficción épica. De un relato que muestra una emergencia interestelar impensable a un clásico de la cultura de masas. La selección recorre lo mejor de los relatos más emocionantes sobre mundos y realidades posibles.

Sunshine: alerta solar

El realizador Danny Boyle tomó lo que podría ser una mirada genérica a un desastre cósmico y lo hizo en una versión peculiar acerca del apocalipsis. Eso, al basar el argumento en la perspectiva de las víctimas. Sunshine: alerta solar, podría, incluso, limitarse solo a reflexionar acerca de lo que podría ocurrir en nuestro mundo en medio de una debacle total. Pero en lugar de eso, cuenta la tragedia colectiva de un sol moribundo, como una perspectiva acerca del hombre y su visión sobre la vida.

El resultado es de una de esas películas a mitad de lo filosófico y el suspense, que utiliza la ciencia ficción para hacerse preguntas sobre la existencia. Lo que se describe en las primeras escenas como un cataclismo con la capacidad de destruir todo rastro del planeta, se transforma pronto en algo más. Eso, al mostrar los desesperados intentos de los que tratan evitar que un desastre semejante suceda. 

Para su tercer tramo, Sunshine: alerta solar toma caminos más sencillos y se convierte en una aventura especial. A pesar de eso, el punto más fuerte de su trama continúa siendo el mismo. El género que utiliza la tecnología y un dilema moral, en una forma de profundizar en el ser humano. 

Los juegos del Hambre

La saga de Suzanne Collins, inspiró la que en la actualidad se considera una de las franquicias de películas más exitosas del cine. Al mismo tiempo, una brillante serie de películas que analizan la ambición, la codicia y la crueldad colectiva a partir de una perspectiva desgarradora. La historia de Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence) no solo describe las luchas contra un gobierno dictatorial. A la vez, logran captar el nacimiento de una revolución contra un tipo de poder corrompido y ajeno a cualquier humanidad. 

La primera película, que adapta el libro inicial del relato en papel, se estrenó en 2012 y fue dirigida por Gary Ross. Las sucesivas secuelas llegaron pronto y expandieron el universo principal con nuevos detalles y una sofisticada versión de la ciencia ficción. En llamas se estrenó en 2013 y Sinsajo — Parte 1 en año siguiente. Finalmente, la tetralogía cerró la segunda parte del libro final de la colección, con el director Francis Lawrence al frente.

Para su épico final, la protagonista logra vencer al poder central gracias a su habilidad y esforzada dedicación. Pero al mismo tiempo, demuestra el corazón — lleno de amargura, en ocasiones — de la narración. En el 2023, la saga llevó a la pantalla grande una precuela. Balada de pájaros cantores y serpientes explora en la creación de los violentos juegos. Además, la lenta corrupción del malvado presidente Coriolanus Snow (Tom Blyth), hasta volverse un símbolo de una faceta cruel del poder. 

Hijos de los hombres

La adaptación de Alfonso Cuarón de la novela homónima de P.D. James, se ha convertido en un clásico de la ciencia ficción. Con su exploración distópica acerca de la caída de la civilización en medio de la infertilidad de la raza humana, la premisa es inquietante. Mucho más, cuando logra combinar varios tropos del género — incluyendo una tragedia colosal que amenaza la existencia misma — en un escenario conmovedor.

La historia de la última mujer capaz de concebir, es algo más que un anuncio acerca de la muerte de la especie humana. A la vez, es una extrapolación sobre cómo la esencia del miedo al futuro, puede convertirse, por medio de la distopía, en una historia elegante y amarga. Theo (Clive Owen), se verá en medio de una batalla que excede la mera idea de un enfrentamiento hostil. Eso, cuando deba encargarse de sostener y proteger a Kee (Clare-Hope Ashitey), que contra todo pronóstico, podría ser la última esperanza de vida en el planeta.

Con su tono pesimista, angustiado y sensible, Hijos de los hombres es de esas películas que logra mostrar la manera en que el miedo colectivo a la muerte, puede manifestarse en la peor crisis. Por otro lado, demuestra que ese temor puede combatirse con la más sincera esperanza. El punto más elaborado y sensible de la producción. 

Tron

En 1982, el director Steven Lisberger, profundizó en el mundo de lo virtual y la despersonalización dentro de escenarios online, incluso antes que eso fuera un tema cinematográfico. Lo hizo, además, con efectos especiales que desconcertaron al público y dejaron claro, las posibilidades del cine para construir mundos a través de la ciencia ficción. Kevin Flynn (Jeff Bridges) descubrirá que el mundo, en su imaginación, puede ser reproducido de manera tecnológica en una dimensión por completo distinta. 

Pero además, que dentro de los paisajes complicados de los hardwares y otras piezas de la computación temprana, puede haber vida. Lo que descubrirá a ser transportado al interior de su ordenador personal y verse en la necesidad de salvar su vida. Bien pensada y mejor narrada, Tron no es únicamente un recorrido por un reino de la ciencia ficción hasta entonces por completo desconocido. Asimismo, plantea la posibilidad de infinitas variaciones de la vida en diferentes formas y lugares del mundo cuántico.

En el 2010, la película tuvo una secuela con Tron: El legado. En la actualidad se filma el cierre de la trilogía de películas de la serie, Tron: Ares, de la mano de Joachim Rønning. Tanto la una como la otra exploran el universo de la original desde una dimensión épica y a través de un peculiar punto de vista sobre el bien. 

Solaris

La novela de Stanisław Lem ha recibido dos adaptaciones en películas. La primera, dirigida por Andréi Tarkovski y estrenada en 1972, se convirtió en un clásico de la ciencia ficción pura con tintes épicos. La segunda, del 2002 y obra del realizador Steven Soderbergh, le llevó casi una década encontrar el reconocimiento a su interpretación pausada sobre el duelo y la ausencia. Las dos películas coinciden en un escenario: la manera en que el espacio exterior puede ser una caja de refracción de los dolores, penas y traumas, del ser humano. Eso, empequeñecido por los misterios del cosmos. 

 Con una perspectiva asombrosa acerca del espíritu del hombre, las cintas narran cómo lo que empieza como un viaje espacial, se transforma en una historia terrorífica. Los astronautas a bordo de la nave titular, comprenderán que el espacio profundo, es el límite de la cordura y el tiempo tal y como lo conocen. Lo que permite al argumento explorar en la sustancia de la realidad, la conciencia y la percepción, a través del dolor emocional.