La serie Echo de Disney+ ha recorrido un largo trayecto antes de su estreno. Desde reescrituras de guion hasta cambios de fecha para su llegada a la pantalla pequeña, pasando por rumores sobre los personajes que incluye. Lo cierto, es que el más reciente añadido al mundo de los superhéroes, llega un momento complicado para la saga. Por lo que Marvel apostó a explorar en la producción en un escenario poco común en sus historias. En el submundo criminal de la franquicia.
Lo que trae de vuelta de manera definitiva al Universo cinema gráfico de la editorial, al villano Kingpin/Wilson Fisk. Interpretado por Vincent D’Onofrio, el personaje alcanzó considerable relevancia debido a su participación en la serie Daredevil transmitida por Netflix. Pero, una vez que esta fue cancelada, se debatió, por años, su regreso al canon oficial de la saga. Algo que ocurrió en Hawkeye, transmitida en el año 2021. En el capítulo cinco, la enorme y cruel figura del jefe del crimen de Nueva York, reapareció. Un suceso que enlazó su historia con la de Maya López (Alaqua Cox) y la futura serie de la heroína.
Pero, por sí solo, Kingpin tiene una crucial relevancia en el Marvel más cercano al estrato delictivo de la ciudad. De hecho, los productores de Echo insistieron en que el malvado jefe criminal, podría considerarse un Thanos de las calles. Lo que demuestra cómo podría influir en una nueva forma de entender a Marvel, más allá de sus héroes tradicionales y escenarios más ligados a la ciencia ficción y a la magia. Wilson Fisk es mucho más que la némesis de varias figuras de La casa de las ideas. También, es un punto clave para entender los relatos más adultos y sangrientos de la editorial.
Disparos, golpes y sangre: una biografía violenta en Echo
Creado por Stan Lee y John Romita Sr., el brutal mafioso hizo su debut en el cómic The Amazing Spider-Man # 50, publicado en julio de 1967. Desde su primera aparición, se le definió como una superpresencia malvada, además de la conexión con todo de mafiosos y criminales violentos en el cómic.
Aunque fue presentado como adversario de Spider-Man y varias de sus primeras aventuras tienen lugar al enfrentarse al alter ego de Peter Parker, poco después se convertiría en el enemigo de Daredevil. También, a lo largo de las décadas, se enfrentaría con The Punisher y Echo. Con esta última, de una manera muy parecida a la que se ha mostrado en la pantalla pequeña. En otras palabras, en una relación de dominio que termina cuando Maya descubre las manipulaciones y crímenes de Wilson Fisk.
Desde su primera aparición, hasta el año 1980, Kingpin pasó de ser el estereotipo de un jefe de la mafia — con conexiones, influencia y dinero — a un hombre sanguinario. Para los volúmenes de Daredevil, escrito por el autor Frank Miller, el personaje dio su salto definitivo a cómo se le conoce en la actualidad.
No solo se trata del criminal más peligroso de Nueva York. También, una figura maligna capaz de matar, torturar y destruir, que utiliza una máscara de respetabilidad para evitar ser capturado por la justicia. La combinación hizo del villano una rareza en un universo poblado por criaturas alienígenas y monstruos de toda índole. Al contrario, Fisk, era un hombre de inteligencia privilegiada, crueldad sin límites y sed de sangre, que usaba armas y cuchillos para matar.
El villano de Echo: la evolución de una figura temible
Entre cambios de enfoque sobre el villano y su evolución, los escritores que tuvieron a su cargo a la siniestra figura, le brindaron un contexto sólido. Según Punisher Max #5 de Garth Ennis publicado en el 2008, Wilson Fisk creció en la ciudad de Nueva York. De niño, fue acosado por su colosal aspecto físico, hasta que al llegar a la adolescencia, convirtió su altura y contextura en pura fuerza muscular. Poco después y cuando ya era un delincuente juvenil en la ciudad temido por su agresividad, pasó a trabajar con el señor del crimen, Don Rigoletto.
Este, le enseñaría las técnicas y vínculos que podían forjarse bajo amenazas y asaltos. Finalmente, y luego de ser guardaespaldas y ayudante del líder mafioso, terminó por matarlo y ocupar su lugar. Lo que le dio un sacudón al inframundo delictivo de Nueva York y hasta dónde sería capaz de llegar Fisk por controlarlo. La posición privilegiada le hizo aún más brutal de lo que era en su juventud, lo que llevó a tener choques con diversos grupos criminales. Desde el sindicato del crimen, Maggia y hasta la organización terrorista HYDRA. El nuevo Señor del crimen se enfrentó a todos ellos por territorio y poder. Y aunque siempre obtuvo victorias significativas, terminó por volverse un sujeto de cuidado y una amenaza a erradicar.
Algo que ocurriría cuando ambos grupos se unieron para vencerle. Fisk fue perseguido y sus bienes confiscados, lo que le obligó a huir a Japón. Sin otro recurso que su inteligencia, una vez en el país Nipón, dedicó años de esfuerzo para recuperar su dinero. Por lo que regresó a Nueva York y provocó una guerra de bandas, que arrasó a sus enemigos y finalmente, le permitió ser el único capaz de pacificar el conflicto. Ya por entonces, sus enfrentamientos con Spider-Man eran conocidos y el personaje solía ser central en varias de las aventuras del héroe.
De criminal a político
Otra vez como poderoso cabecilla del mundo criminal, construyó una fachada como un hombre de negocios generoso y justo. Uno, además, que estableció vínculos con las altas esferas políticas de la ciudad. En medio de este período de relativa paz, contrajo matrimonio con Vanessa y se convirtió en padre de Richard.
Ningún miembro de su familia conocía su rostro como desalmado, criminal y asesino. Pero, ambas facetas de la vida de Fisk terminarían por unirse cuando su hijo descubrió su identidad. Para obtener venganza, este se hizo pasar por muerto y después se enfrentó a su padre como el villano Schemer, con la intención de derrocarle como el capo del crimen. Algo que no logró, pero sí le obligó a prometer a Vanessa, dejaría de delinquir.
En medio de todo lo anterior, el villano pasó de enfrentarse a Spider-Man — al que intentó matar dos veces — a Daredevil. Este último, ya sospechaba de la doble identidad de Fisk. De hecho, en Daredevil #174–175, publicado en septiembre-octubre de 1981, se cuenta que el abogado de Hell Kitchen, seguía sus pasos y sus recursos en el bajo mundo. En especial, cuando promovió como candidato a la Alcaldía de Nueva York a un secuaz títere y después contrató a Elektra para que le asesinara. Un tipo de doble juego que lleva a cabo en varias ocasiones.
Daredevil vs Kingpin
A partir del cómic Daredevil: Born Again, Daredevil #227–233 publicado en febrero-agosto de 1986, Fisk lucha contra Matt Murdock/Daredevil con armas políticas. De hecho, llega a destruir su reputación y ambos terminan en un enfrentamiento callejero que deja cientos de muertes a su paso, con la consecuente destrucción de la vida pública del villano.
Después de otro viaje a Japón, Fisk vuelve a Nueva York y manipula a Maya López (Echo) y le hace creer que Daredevil. En medio de la furia de la joven, le ofrece los medios para cobrarse venganza. No obstante, Maya termina por descubrir la verdad — esto es, que Kingpin es el responsable — y se enfrenta a él. El conflicto acaba con Daredevil disparando contra Fisk y dejándole ciego. No obstante, después recupera la vista, pero vuelve a ser un criminal buscado por la ley.
Kingpin en el Universo Cinematográfico de Marvel
En el más reciente tráiler de Echo, se confirma que la serie de Daredevil de Netflix es canon en la actualidad. Por lo que el personaje vuelve al escenario de las calles de Nueva York para enfrentarse con Murdock. Además, habría que sumar su aparición en Hawkeye, en el que se vincula con Maya López y cuyo capítulo final, muestra a esta liberándose de su influencia.
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Lo más probable es que el argumento que cuenta la historia de la heroína, brinde contexto a Fisk y a sus nuevos puntos de influencia. Lo que permitirá ser el centro del lado más adulto de Marvel. Una perspectiva interesante de cara a las más recientes narraciones de estudio.