En la segunda temporada de La Casa del Dragón, algo queda claro: la lucha será por aire y a fuego. Mientras las distintas facciones en disputa tratan de trazar estrategias por tierra, los jinetes de dragón, capaces de volar y controlar a las míticas bestias, se convierten en la diferencia entre el triunfo y la derrota. Mucho más, cuando tanto los Verdes como los Negros pueden presumir que tienen entre sus filas a varias de las criaturas más antiguas y temidas del Continente.
Lo anterior compone un escenario que apunta a que la mayor parte de La Danza de Dragones dependerá de quién esté a lomos de un dragón y cuánto pueda controlarlo. Algo que quedó claro en el capítulo seis de la segunda temporada de La Casa del Dragón, cuando el ejército Lannister se negó a avanzar en su conquista aliada a La Fortaleza Roja sin la protección del gigantesco Vhagar.
Por otra parte, la reina Rhaenyra (Emma D’Arcy) se encuentra en la complicada situación de tratar de encontrar descendientes Targaryen capaz de montar un dragón. Todo, con el objetivo de afianzar sus respectivos escenarios con vistas a una inminente colisión en una batalla definitiva.
Pero mientras eso ocurre, te contamos cuáles son los dragones que aparecen en la segunda temporada de La Casa del Dragón. Un bestiario que abarca no solo lo más emocionante del mundo imaginado por George R.R. Martin, sino los puntos más interesantes de sus historias.

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Syrax

El dragón de la reina Rhaenyra Targaryen se ha distinguido hasta ahora por, además de ser una imponente bestia, tener un vínculo profundo con su real jinete. Desde compartir los dolores del parto de la monarca hasta experimentar la pérdida de su hijo en medio del ataque de Aemond y Vhagar. Lo cierto es que, juntas, forman una alianza poderosa y temible.
Según el libro Fuego y Sangre (2018), que sirve como base para La Casa del Dragón, Syrax tiene escamas rojizas, es rápida y posee la capacidad de volar con las alas plegadas al cuerpo para mayor velocidad. Como dato curioso, la ficción agrega que la reina la montó por primera vez a los siete años. Lo que convierte la relación entre ambas, una de las más duraderas en la historia.
Caraxes

El fiel y aterrador compañero de Daemon Targaryen en La Casa del Dragón es, tanto en la ficción de la pantalla pequeña como en el papel, una máquina de destrucción masiva. No solo es capaz de escupir llamaradas a cientos de kilómetros de distancia. A la vez, puede volverse especialmente agresivo e incontrolable.
Y sí, es tal y como lo piensas: un reflejo del comportamiento de su jinete, conocido por su violencia y capacidad para la táctica militar. Como dato curioso, Caraxes tuvo como primer jinete a Aemon Targaryen, padre de Rhaenys. Pero una vez que este murió, Daemon logró montarlo a pesar de su agresividad.
Meleys

En La Casa del Dragón, Rhaenys Targaryen murió en digna batalla y, como bien dijo su nieta Baela, con toda la dignidad que hubiese podido escoger. Junto a ella, y casi de la misma forma, cayó Meleys, una de las criaturas más legendarias de los Siete Reinos.
De escamas color rojo vivo, Meleys era conocida como la Reina Roja. Enorme, poderosa y antigua, era muy temida. En el libro original se la menciona como una presencia magnífica cruzando los cielos de Poniente.
Fuegosol/Sunfyre

Aegon II Targaryen es un rey torpe que debe enfrentar, además, la peligrosa codicia de su hermano. Pero una de las pocas cosas de las que puede presumir es de tener un joven dragón de escamas doradas que escupe fuego del mismo color.
Fuegosol/Sunfyre es considerado en Fuego y Sangre como una de las criaturas más hermosas de los Siete Reinos. En La Casa del Dragón se le ve en el capítulo cuatro, donde lucha contra Vhagar y Meleys, aunque no está claro si sobrevive a las malas condiciones en que queda tras una riña de esa magnitud.
Vhagar

Aemond Targaryen es el nuevo regente de los Siete Reinos y está dispuesto a llevar a cabo la Danza de Dragones, arrasando con la resistencia entre Verdes y Negros. En especial, llevando el temor a lomos de Vhagar, el dragón más viejo, temible y violento de Poniente, que llegó a La Casa del Dragón con la imagen temible que se describe en la ficción literaria.
Sin embargo, Vhagar es mucho más que una bestia legendaria y terrorífica. Fue el dragón de la reina Visenya Targaryen y se le usó durante los años de conquista. En la serie también perteneció a Laena Velaryon. Eso, antes de llegar a manos del tiránico Aemond y sus impulsos bélicos.
Bruma/Seasmoke

Antes de perseguir a Addam de la Quilla con la decidida intención de hacerlo su jinete, Bruma/Seasmoke fue la montura de Laenor Velaryon. En el libro de George R. R. Martin se le conoce por ser gris y pequeño.
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En La Casa del Dragón se reveló como una criatura hermosa y aterradora, mucho más perspicaz de lo que podría suponerse. Ahora que está en manos de una semilla de dragón, seguramente tendrá un papel preponderante en la Danza de Dragones.
Vermax

El príncipe Jacaerys Targaryen es brillante como diplomático y fiel defensor de su madre. Y monta a Vermax, un enorme dragón gris, que en la ficción se describe como especialmente violento. No obstante, hasta ahora se ha comportado como una criatura misteriosa que sigue atento a las órdenes de su jinete.
Vermithor

La montura del viejo Rey Jaehaerys, abuelo de Viserys, es un dragón gigantesco que vive en las catacumbas y abismos de Rocadragón luego de la muerte de su jinete.
Pero la Furia Bronce está a punto de convertirse en protagonista de su historia. Esto sucederá una vez que encuentre a su nuevo compañero de guerra, que será, como no, una semilla de dragón.
Danzarina Lunar/Moondancer

La princesa Baela Targaryen es diestra como jinete y una intuitiva consejera al trono. También monta a Danzarina Lunar/Moondancer, una bestia exquisita que en la literatura se describe como hermoso y fatal, debido a su rapidez por aire y por tierra. Algo que en La Casa del Dragón ya vimos durante su persecución contra Criston Cole.