En El especialista, Hollywood es un gran escenario sostenido por una multitud de trabajadores y buenas intenciones. Lo que hace, que la comedia — que, también, es un tributo al cine de acción — haga un repaso por la llamada magia del mundo cinematográfico. Eso, desde el punto de vista de Colt Seavers (Ryan Gosling), un doble de riesgo que conoció días mejores y que, ahora, trata de recuperarlos. Pero más allá de la aventura al trasfondo — y el burlón conflicto que satiriza el mundo de la industria — la cinta es un gracioso recorrido a través del espectáculo. En especial, en su dimensión más artesanal, curiosa y que requiere del esfuerzo humano para llegar a la pantalla grande.
Todo lo anterior habría parecido un poco sermoneador de no ser por el humor que el director David Leitch imprime a la película. De hecho, uno de los puntos más altos de El especialista, es su capacidad para hacer reír, asombrar y además, reflexionar, todo en una escena. Al mismo, sin necesidad de caer en tópicos sensibleros o en giros de guion en extremo complicados para lograr la carcajada. El resultado es una de las grandes cintas del género de comedia, que, asimismo, utiliza la acción como telón de fondo.
Si te gustó este experimento afortunado, te dejamos cinco comedias curiosas que disfrutarás también. De un asesino a sueldo retirado que debe embarcarse en un viaje familiar a un grupo de actores en plena pandemia. El recorrido atraviesa lo mejor de varios géneros y también, una interpretación novedosa del humor que cautivará a los que buscan reír gracias a una buena premisa. El punto que une a todas las producciones de la lista.
Plan en familia
Dan Morgan (Mark Wahlberg) es un vendedor de coches con una familia adorable y sin mucho que contar sobre sí mismo. Esposo devoto y padre de tres, no parece tener nada destacable. A no ser sus perfectos reflejos y la extraña sensación para sus allegados que su pasado se diluye en datos genéricos.
Pero la verdad detrás de esa fachada aburrida se volverá un peligro inminente, cuando se descubra lo que oculta tan afanosamente. No solo se trata de su largo historial como asesino a sueldo — que ya sería un problema — sino también, que está siendo perseguido por enemigos peligrosos. Por lo que, de pronto, la tranquilidad hogareña se transformará en un viaje apresurado por Norteamérica, en el que todos, en casa, descubrirán lo que el padre oculta. Mucho más, cuando el aparente apacible Dan, tenga que tomar las armas para evitar les asesinen a todos.
Disparatada y a ratos emotiva, la cinta de Simon Cellan Jones es un disfrute por sus buenos momentos de acción y a la vez, por su ingenio humorístico. Lo que la hace una comedia ideal para los que disfrutan de ambos géneros.
Héroe por encargo
Mason (John Cena), es un exagente que decidió que sus apreciables capacidades para proteger y defender podían ser una profesión. De modo, que trabaja como un guardaespaldas sobre calificado en misiones que no son especialmente riesgosas. Lo que le llevará a convertirse en el protector de la periodista Claire Wellington (Alison Brie), cuando esta última deba entrevistar a un peligroso dictador.
Pero todo irá a peor, cuando en mitad de lo que parecía un trabajo periodístico sin demasiados sobresaltos, ocurra un golpe de Estado. Por lo que Mason y Claire deberán salvar la vida, pasar desapercibidos y además, evitar comprometer a Norteamérica en un conflicto diplomático. Eso, en las situaciones más extravagantes y de un humor sardónico, que no solo se burla de la política, sino también del llamado deber periodístico.
Para su desternillante final, Héroe por encargo deja algo en claro. Sus protagonistas lograrán salvar la vida, pero al costo de su reputación e incluso, su sentido del ridículo. Un giro que hace reír a carcajadas por improbable y absurdo. Su singular y mejor cualidad.
Free Guy: tomando el control
Guy (Ryan Reynolds) tiene una vida, para él, perfectamente normal. Todos los días, acude a su trabajo en el banco de la ciudad y vive la misma rutina de atender a los clientes, saludar a los conocidos y asistir a un asalto. Después regresa a casa entre explosiones y dispararos para esperar, que al día siguiente, todo ocurra de la misma manera y en exacto orden.
Por supuesto, esa delirante rutina tiene una explicación demencial. El personaje y todo lo que le rodea, forma parte de un juego de video, en la que es un NPC (Non Playable Character). La premisa se hace más asombrosa e hilarante, una vez que Guy toma conciencia de lo que realmente es y a su alrededor, la realidad comienza a tomar un nuevo sentido.
Lo anterior, mientras en el mundo real, los creadores de la experiencia de videoconsola, se esfuerzan por evitar que un malvado empresario desconecte el juego. Mucho peor, que arrase con la existencia de Guy, convertido en héroe de los suyos. En su divertida conclusión, Free Guy: tomando el control logra mezclar este escenario extravagante con una peculiar moraleja sobre el amor y la libertad personal. Toda una proeza en el terreno de la comedia.
La burbuja
La premisa de esta película de Judd Apatow resume los complicados meses de la cuarentena y los transforma en una broma retorcida. En La burbuja, la pandemia llegó y arrasó con todo a su paso. Incluyendo la más reciente entrega de una conocida franquicia de acción. Por lo que su elenco, encabezado por Dieter Bravo (Pedro Pascal), la influencer Anika (María Bakalova), Carol Cobb (Karen Gillan) y Dustin Mulray (David Duchovny) deberán encerrarse en un hotel para grabar.
Pero la mezcla entre egos, ambiciones, traumas y manías puede ser explosiva. Y lo será, a medida que el grupo de actores, se enfrenten entre sí para lograr la mejor toma, mientras luchan por destacar y la neurosis colectiva. Con cada día que pasa, el aislamiento provocará las situaciones para singulares y graciosas, que culminarán en un gran final digno de Hollywood.
Esta fantasía, que mezcla la metarreferencia y el humor, podría no haber funcionado — y ocurre en varios momentos — a no ser por la química entre su elenco. Sin embargo, lo más gracioso resulta la forma en que el grupo de intérpretes se burlan a carcajada limpia de sus colegas. Un giro que convierte a la cinta en una burlona visión de la fama, el reconocimiento e incluso, el amor.
La galería de la mafia
Patrice (Uma Thurman) es una marchante de arte que atraviesa un momento especialmente bajo. Y no tendrá mejor idea que asociarse con Gordon (Samuel L. Jackson) y a Reggie (Joe Manganiello) para salir del bache que atraviesa su galería. Solo que este dúo no tiene nada que ver con el mundo de las bellas artes, sino que son criminales de alto calibre, en busca de un medio de salir de un atolladero.
La situación se volverá caótica, cuando la dupla criminal se convierta en una sensación en el circuito artístico de Nueva York y mucho más, en promesas en el ámbito mundial. Pero pronto, la muy sorprendida Patrice tendrá que lidiar con no solo óleos y precios, sino también con balas, en un tercer acto que convierte a la cinta en una broma a gran escala sobre el arte.