Stephen King es uno de los escritores con mayor número de obras adaptadas al cine: en los últimos cinco años, al menos diez de sus historias se han convertidos en películas y series con resultados desiguales, pero siempre despertando una considerable fascinación en el público. Sin embargo, la clásica novela It se convirtió quizás en una nueva manera de comprender el material del autor y la forma en que puede transformarse en un exitoso producto cinematográfico. Como una de las adaptaciones más exitosas de los libros del escritor se demostró además que todavía hay mucho que debatir sobre cómo llevar a la pantalla grande obras literarias sin perder su espíritu original.
Explicamos el final de ‘It: Capítulo 2’
Considerada por mucho tiempo como “inadaptable”, la novela llegó a la gran pantalla con una inteligente propuesta argumental que logró sintetizar las más de mil páginas del material original y, además, conservar el espíritu del célebre clásico del terror. Por supuesto, adaptar una narración de semejante envergadura conlleva todo tipo de desafíos, sobre todo la posibilidad que no incluir muchas de las escenas consideradas imprescindibles dentro del material original. Con It, el riesgo es incluso mucho mayor: la detallada historia en papel enlaza el pasado y el presente en una cosmogonía compleja emparentada con todo tipo de influencias literarias. ¿Cómo traducir semejantes matices y crear una versión sólida para el cine? ¿Cómo evitar simplificar en exceso el libro en que se basa el guion?
El guionista Gary Dauberman enfrentó el reto en dos ocasiones: coescribió la película original y regresó para su segunda parte, con la responsabilidad de analizar el argumento incluso desde un punto más complicado. Si en el año 2017 It debió presentar a personajes entrañables que forman parte de la historia del género del terror, la secuela tendió un puente entre la adorable pandilla de perdedores y sus pares adultos, algo que encaró desde una postura muy específica.
“Mi enfoque siempre fue: me encantan los libros; volvamos a lo básico. (Una postura) que puede ser difícil cuando se trata de un libro largo y no se puede hacer todo. Intentas hacer lo que puedas” explicó el guionista para Variety, en una entrevista en la que explicó el trayecto de la novela al cine. “Si bien tienes las mejores intenciones de tratar de incluir todo, simplemente no es posible”.
Para el guionista —*con una amplia experiencia en el género de terror gracias a sus créditos en la trilogía de Annabelle***— lo esencial de la adaptación de un libro clásico del género es captar la atmósfera de la obra original, algo que logra al mantener un equilibrio entre incluir buena parte de las escenas más interesantes de la novela y eliminar otras tantas. Al final, el resultado en la pantalla grande es una combinación entre lo mejor de la obra de King y una revisión inteligente de sus puntos más altos.
Para comprender mejor el proceso, analizamos cuales los cambios más importantes en It con respecto a su versión literaria y que tanto peso tienen en el argumento final.
Viejos conocidos con una nueva dimensión
La pandilla de perdedores se convirtió en un grupo de adultos que no recuerda el traumático hecho al que sobrevivió y mientras que en el libro, los terrores invisibles son parte de una forma u otra de su vida, para su versión en pantalla grande, el guion se tomó varias salvedades. Sabemos poco de la vida de los personajes como adultos más allá de algunas insinuaciones de que Bill es un escritor, Ben un arquitecto reconocido y Bev diseñadora. No obstante, el cuidadoso contexto que King les brindó se difumina en su mayor parte. Más allá de eso, el argumento cinematográfico no parece muy interesado en analizar la forma en cómo el terrorífico encuentro con Pennywise influyó en el futuro de la pandilla, algo a lo que el libro dedica un buen número de páginas.
Un pequeño lugar en las sombras
Aunque no sorprendió a los lectores, la casa club de la pandilla de los perdedores fue un giro novedoso —e inesperado— para el resto del público. El giro argumental, que tiene una destacada importancia en el libro, no apareció en la primera película, por lo que su aparición en la secuela pareció al menos un poco forzada. No obstante, el guion se esfuerza por brindar sentido a los flashbacks que incluyen recuerdos reprimidos para cada uno de los personajes y el pequeño refugio, es uno de ellos.
Caminos distintos
Una de las grandes críticas A It: Chapter II fue la en apariencia fortuita decisión que los personajes recorrieran de un lado a otro y por separado el pueblo de Derry, en una separación que alargó el tramo medio de la película de manera innecesaria. No obstante, se trata de un giro argumental extraído del libro y que, aunque en la narración literaria es mucho más fluida y orgánica, cumple el mismo papel que en su versión cinematográfica: la de permitir a la pandilla familiarizarse de nuevo con el pueblo —y sus horrores escondidos— y en el caso de la película, encontrar además un objeto en particular que les una a su pasado en común.
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Un encuentro macabro
Y mientras los personajes recorren Derry con el afán de encontrar respuestas a sus temores, ocurre una de las escenas creadas en exclusiva para su versión cinematográfica. Nos referimos a la visita de Bill a la casa de los espejos y su enfrentamiento con Pennywise en medio de reflejos, mientras este último acecha a un pequeño niño desconocido. Se trata de una secuencia durísima que conserva el espíritu del libro sobre los terrores inconfesables que alberga Derry bajo su pátina de normalidad y que, de alguna forma, contextualiza a Bill dentro del trauma de la pérdida de su hermano menor a manos de la criatura que acecha desde las alcantarillas.
El ritual de Chüd y sus extrañas implicaciones
Uno de los cambios más interesantes de la película con respecto a la trama del libro, es el ritual de Chüd y sus consecuencias, la gran conclusión de la historia y uno de las conclusiones más controversiales de cualquier novela del género de terror. Mientras que en la versión literaria Bill y Pennywise se enfrentan en una batalla mental que les lleva a ambos a los confines de la realidad física tal y como la conocemos, en la pantalla grande se trata de una lucha contra los temores y los dolores más profundos de la pandilla de perdedores. Algo de agradecer si recordamos que en la novela Pennywise muestra su verdadera naturaleza terrorífica — una araña gigantesca, que además está a punto de reproducirse — y crea una estrafalaria dimensión cósmica que quizás, no habría tenido buenos resultados en la pantalla grande.
El epílogo y la carta de Stan
Otro cambio notable, es el hecho que el guion decida que los Perdedores podrán recordar su encuentro final con Pennywise, una vez fuera de Derry, lo que permite ese epílogo un tanto edulcorado en que todos los miembros sobrevivientes de la pandilla reciben una carta del difunto Stan, en una especie de despedida postrera. Además, la carta está llena de citas del diario que Mike lleva en el libro — único vestigio de lo ocurrido y principal fuente de información cuando el personaje comienza a olvidar — y una mirada mucho más amable, sobre el miedo y lo que Pennywise fue durante su época de asedio. Para bien o para mal, It: Chapter II tiene un final feliz, que sin embargo consigue hilvanar el espíritu siniestro que la novela deja entrever en sus páginas finales.
Con el éxito en taquilla de It: Chapter 2, lo más probable es que tengamos muchas más adaptaciones de la obra de Stephen King, que se unirán a la ya anunciada segunda temporada de la serie de HULU Castlerock -basada en el universo del escritor- y La Historia de Lisey, que el canal streaming Apple Plus adaptará para la pantalla chica. Para alivio de sus fanáticos, e incluso quienes no lo son tanto, queda un largo trayecto que recorrer para la obra de King.