Amazon se está enfrentando a una nueva polémica tras comenzar a eliminar su sistema Just Walk Out de las tiendas Amazon Fresh. La compañía ha confirmado que está dejando de utilizar la tecnología que permitía a los usuarios entrar, coger cualquier producto y salir por la puerta. El sistema es ineficiente, y no por culpa de los usuarios.
Al contrario de lo que todo el mundo puede pensar, Just Walk Out no utiliza solo IA para detectar qué producto compras: son unas 1.000 personas, afincadas en la India, las que se encargan de vigilar las cámaras, hacer un seguimiento y cobrar los alimentos.
Las 40 tiendas de Amazon Fresh repartidas por Estados Unidos han reportado miles de incidencias, retrasos en los tickets de compra y errores. El factor humano es más impreciso de lo que Amazon había planeado, por lo que está sustituyendo la tecnología.
La IA necesitaba 1.000 indios vigilando movimientos
Tras el anunciar que Just Walk Out va a dejar de operar, se ha conocido la rudimentaria forma de Amazon para cobrarte ese sandwich de pollo y el zumo de naranja ecológico. La promesa de tiendas totalmente autónomas no era lo que se esperaba. La idea de sustituir al personal por una inteligencia artificial no ha salido bien. Esta IA necesitaba el apoyo continuo de 1.000 personas en la India.
La novedad hizo pensar que las tiendas Amazon Fresh eran el futuro: escaneabas un código QR al entrar, cogías tu comida y salías por la puerta sin tener que hacer colas. Lo que nadie se imaginaba es que ese rastreo no era automático: una persona, a unos 14.000 kilómetros, era la encargada de seguir tus movimientos por las cámaras desde que entrabas hasta que salías.
Para lamento de Amazon, este proceso no era tan eficiente como se esperaba. Según cuenta The Information, 700 de cada 1.000 pedidos debían ser revisados por humanos a partir de 2022. Amazon pretendía que estas revisiones fuesen en 50 de cada 1.000 pedidos, algo que se quedó muy lejos de la realidad.
Ahora sí, adiós a los humanos en Amazon Fresh
Desde hace un tiempo, Amazon está implementando la tecnología Dash Cart en sus tiendas Fresh. Esta ya no depende de cámaras ni vigilancia desde un país remoto: utiliza carritos inteligentes capaces de detectar qué estás comprando. Basta con escanear un QR al entrar, coger un carrito e ir echando productos.
El carrito está conectado a tu cuenta de Amazon y, mediante sensores y cámaras, es capaz de ir sumando los productos y cobrarlos cuando sales de la tienda. Ahora sí, sin supervisión humana y con una tasa de fallo mucho menor.
Esta es la tecnología que ya está sustituyendo a Just Walk Out en las 40 tiendas de Estados Unidos. No es tan cómoda al requerir el uso de un carro hasta para comprar una sola botella de agua, pero deja de lado la supervisión humana que tantos dolores de cabeza ha dado a los usuarios.