El iPhone de 2018 y sus tres variaciones, si hacemos caso a las filtraciones, tendrán carga rápida, pero sólo funcionarán con cargadores USB-C previamente autorizados certificados, según un reporte publicado por Macotakara, citando varias fuentes en líneas de producción asiáticas.
Filtraciones previas indicaban que Apple sacará a la venta tres tamaños distintos del iPhone y dentro del paquete vendrá un cable Lightning a USB-C con su respectivo cargador compatible, capaz de hacer carga rápida por medio de 18W (9V/2A) de potencia.
Pero aquellas personas que quieran adquirir más cargadores de dicha potencia para obtener carga rápida en sus nuevos iPhones tendrán que hacerlo de un fabricante con una certificación de especificación 3.0 de revisión de entrega de energía vía USB. Eso significa que no se va a poder ir a cualquier tienda y comprar cualquier cable y cargador, sino que debemos fijarnos que tenga dicha aprobación.
El próximo iPhone no tendrá USB-C, pero sí algunas de sus características
Evitando historias de smartphones que explotan
Si la reacción a la posibilidad que la carga rápida solo llegue con accesorios previamente autorizados es no es positiva, es importante recordar el caso de los Note que explotan, probablemente por algún componente de carga rápida, es mejor minimizar problemas de sobrecalentamiento usando cargadores certificados.
El estándar y certificación es relativamente común, con el soporte de más de 50 compañías, por lo que encontrar una alternativa será fácil y no necesariamente se tiene que adquirir un cargador de Apple.