Esta mañana ha sido presentado por Nokia su nuevo dispositivo con una versión altamente modificada de Android, el Nokia X2, el cual es sucesor del Nokia X, que es el que inició esta gama de smartphones con Android de la compañía finlandesa, junto con el Nokia X+ y el Nokia XL. Pues junto al anuncio del X2, Nokia ha dejado caer de pasada que no actualizará ninguno de los smartphones anteriores a la nueva versión de la plataforma X.
Este movimiento de Nokia es una noticia terrible para los early adopters que compraron estos terminales.
Echemos cuentas por un momento: el Nokia X, X+ y XL fueron presentados en febrero de este mismo año, durante el MWC de Barcelona. Y tan sólo 4 meses después presentan su sucesor, el Nokia X2, con algunas modificaciones de hardware, como la inclusión de un flash LED para la cámara, así como de un botón HOME para facilitar el manejo en la interfaz similar a Windows Phone. El Nokia X2 parte también con un hardware ligeramente superior, especialmente en el apartado de la memoria RAM. Y a la vez que sacan esta actualización de terminales demasiado pronto (4 meses entre dispositivos es absurdo), anuncian que abandonan lo que iniciaron poco tiempo atrás, dejando también en la cuneta al resto de usuarios que compraron uno de estos de terminales.
Tengamos también en cuenta que Nokia, está ahora bajo control de Microsoft, una compañía que a su vez también tiene bajo control otro sistema operativo, Windows Phone, el cual con su última actualización se anunció que llegaría a un amplio rango de dispositivos, en una gran política de actualización, difiriendo en gran medida de lo hecho por Nokia. Y que esta política de actualizaciones con el Nokia X y demás ha sido aún peor que la seguida por compañías como HTC con su One X+, LG con su Optimus 2X o Motorola con su Atrix. Nokia debería replantearse seriamente esta estrategia para el futuro, ya que esto no genera nada salvo desconfianza por parte de los usuarios a la hora de comprar un dispositivo de la gama X.