Realizar compras desde el celular es una tendencia fuerte en los hábitos y costumbres de los usuarios de teléfonos móviles a nivel mundial, esta proceso, conocido como m-commerce o comercio móvil, ha venido adquiriendo mayor presencia en los principales mercados de Asia, Europa y América, sin embargo, en México todavía no ha despegado del todo, en un escenario complejo, con diversos matices en donde resulta que la mayoría de los internautas con acceso a internet a través de sus smartphones y tablets, no se encuentran dispuestos a realizar actividades de comercio móvil a través de sus terminales, lo que posiciona al país en una situación rezago comparado con otras naciones que muestran una adopción más rápida de esta tendencia.
La inseguridad, el freno del cambio
De acuerdo con un nuevo estudio realizado por la consultora TNS Néxico, bajo el nombre de Vida Móvil, durante 2012, se estima que ocho millones de mexicanos realizaron al menos una compra a través de sus dispositivos móviles, mientras que los 36 millones de internautas móviles restantes manifestaron no estar interesados en realizar esta práctica, debido a la sensación de inseguridad y vulnerabilidad de la transacción que les representa hacerlo mediante un móvil, así como la ausencia de incentivos. Luis Chávez, Director de servicios de esta firma recalca estos como las factores del retraso:
Vamos muy atrás. No hay esfuerzos enfocados de parte de los retailers para que la gente los use más (los servicios de comercio móvil), por ejemplo ofrecer contenido adicional o dar valor agregado si te conectas dentro de la red de la tienda. Están muy focalizados en el descuento por ejemplo pero no en desarrollar contenido aunque el teléfono celular es actualmente es uno de los frentes que más usan los usuarios.
En uno de sus más recientes estudios, la Asociación Mexicana de Internet -AMIPCI señaló que el 41% de los internautas nacionales encuestados consideró que la razón por la que no compran en Internet es debido a que dudan de la seguridad de este medio, lo que constituye hoy en día el principal freno psicológico para la adopción de este modelo. Algo que en el corto plazo no podría ser erradicado.
La comparativa y la oportunidad de México
México es visto como un actor potencial para la adopción del m-commerce en Latinoamérica.
En México existen más 101 millones de usuarios registrados de telefonía móvil, en donde sólo 8 millones han realizado compras desde el celular, esto representa apenas el 7.9% del total, una cifra bastante baja en comparación con otros países, como es el caso de Estados Unidos, donde cerca del 30% de sus usuarios (32 millones de personas) han realizado una actividad de comercio móvil. En lo que toca a Reino Unido, el 26% (19 millones) lo han realizado, en Corea del Sur el 43% (22 millones), teniendo como un interesante contraste el caso de España, donde se estima que sólo el 6% de su base de 55 millones de usuarios, ha realizado prácticas de m-commerce, una cifra que apenas representa poco más de tres millones, de acuerdo al estudio Mobile Commerce 2013, desarrollado por la Online Business School. Se atraviesa por un momento potencialmente fértil y de gran oportunidad para el crecimiento del comercio móvil en América Latina de acuerdo con el más reciente estudio del ConsumerLab de Ericsson, en donde posicionaron a México como uno de los principales países para el impulso de estas actividades, junto con Argentina, Brasil, Chile y Colombia. Resaltando como uno de sus principales retos la cuestión de la seguridad informática y la brecha de usuarios de telefonía móvil que no cuentan con acceso a servicios bancarios, que son identificados como el principal punto de enlace para los usuarios practicantes del m-commerce.
El panorama para México es claro, se trata de un mercado sano, que vive un momento de cambio a nivel legislativo y tecnológico. La adopción del comercio móvil es algo que parece ir incrementando gradualmente aunque en comparación con otros países la proporción sea baja, sin embargo la aceptación de esta práctica y su uso masivo dependerá directamente de lo que se realice para contrarrestar los factores identificados como frenos para el crecimiento de las compras desde el celular en este país.