Primeras impresiones del Asha 501

Con la maquinaria de rumores en marcha, que tiene los ojos puestos en los nuevos iPhones que se presentarán este otoño, muchos usuarios se preguntan qué planes tiene Apple con el futuro de su dispositivo de streaming, el Apple TV.

Ahora, cuando el resto de accesorios de la compañía como el AirPort o el Time Capsule se han renovado en la última WWDC, le toca el turno al equipo que quizás está mas infravalorado de la compañía pero que, visto el crecimiento de su base de usuarios y las diferentes aplicaciones que tiene, sigue teniendo un enorme potencial que Apple puede explotar con relativa facilidad.

El televisor de Apple como ¿sustituto?

A día de hoy no conocemos los planes de Apple sobre si sacará al mercado una televisión propia o no y, debido a las diferencias tan dispares en las necesidades de los usuarios, en ningún caso considero, a día de hoy, que pueda tratarse de un producto sustituto del Apple TV actual, más bien tendríamos que analizarlo como una nueva categoría dentro de la gama de productos de la compañía. El Apple TV es económica y fácilmente reemplazable

En este sentido, muchos de los usuarios actuales de Apple no quieren o no pueden permitirse un televisor de Apple, puesto que viendo los precios actuales del iMac o del propio Thunderbolt Display, que superan con creces los de un televisor de gama media, no sé hasta que punto podría convertirse en un equipo de masas como sucede con otros productos de la compañía.

Además, a esto se le suma un problema adicional: muchos usuarios no querrán sustituir su televisor actual por el de Apple cuando pueden conectar un dispositivo externo que puede ofrecerles las mismas funciones en una décima parte del precio, por lo que el concepto actual del Apple TV, como accesorio, se convierte en la mejor opción para disfrutar de contenido en streaming en nuestro televisor, siendo además reemplazable fácilmente en el tiempo sin que requiera un gran desembolso y portable y económico al mismo tiempo.

La amenaza de Roku y Chromecast

Pero Apple se enfrenta a otro desafío. Sus competidores potenciales como Boxee y Roku siguen aumentando su base de usuarios y ofrecen muchas de las características del Apple TV en un precio mucho más reducido. El Roku HD o el Roku 2 XD son buenos ejemplos de ello y, de seguir en esta dinámica, van a forzar a Apple a que acabe por replantearse las posibilidades de su producto y empezar a pensar en él no como un hobby, si no como una plataforma con posibilidades extraordinarias, donde las aplicaciones podrían dar mucho que hablar. La competencia está haciendo las cosas muy bien

Además hay un recién llegado que está captando la atención de los medios y usuarios y está siendo comparado con el Apple TV aunque parta de un concepto algo distinto. Google Chromecast y sus $35 dólares de precio de venta al público pueden cambiar la balanza a su favor en el momento de la compra y, aunque de funciones más limitadas que el Apple TV, tiene detrás a Google junto con una base de usuarios dispuestos a darle una oportunidad a ese stick se coloca al HDMI de nuestro televisor y nos permite ver contenido en él por el precio que cuesta una edición especial de DVD de nuestra película favorita.

Matcha.tv y el futuro de iOS 7

Quizás sea con la llegada de iOS 7 al Apple TV cuando empecemos a ver que nos tiene preparado Apple para su hobby más querido por los usuarios. La compra de Matcha.tv junto con su tecnología podría dar al Apple TV el empujón suficiente que acabe por enamorar a más usuarios que quieran llevar el contenido de sus equipos o de sus canales favoritos a sus televisores.

Por ello, si Apple juega bien sus cartas, renueva el equipo dándole un lavado de cara y la versión de iOS 7 para el Apple TV cumple con su cometido como todos esperamos, podríamos estar ante un nuevo filón de ventas para la compañía y desde luego, no son pocos los usuarios que están esperando la renovación de la caja tonta de Apple.

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