Desde que Sony se hizo con la totalidad de la empresa relacionada a los móviles que mantenía en sociedad con Ericsson, llamada por supuesto Sony Ericsson, hemos visto muchos cambios a lo largo de más de un año desde que el cambio se hizo efectivo y comenzamos a notar el crecimiento de la marca Xperia como nunca antes, presentando terminales tan increíbles como el más reciente Xperia Z, entre otros. Hoy, la empresa japonesa asegura que su estrategia para el mercado de la telefonía está a punto de cambiar nuevamente, o mejor dicho, evolucionar, y adaptarse a más territorios en vista de convertirse en el tercer mayor fabricante de smartphones en el mundo.
Hasta ahora hemos conocido grandes terminales por parte de Sony Mobile, como todos los nuevos Xperias desde el Xperia Ion hasta los más punteros como el Xperia S, el Xperia T y de nuevo, su nueva joya de la corona, el Xperia Z. Pero en esta estrategia hace falta algo más: modelos de smartphones para los bolsillos menos pudientes.
Es así como Sony asegura que planea apostar por los mercados emergentes y así entonces rivalizar con las empresas que al día de hoy cuentan con el dominio de los territorios menos tomados en cuenta por los grandes fabricantes, especialmente al estancarse en una sola gama de productos, la de terminales gama alta.
Según estudios y analistas, durante el último trimestre del año 2012 Sony ocupó el cuarto lugar de mayores fabricantes de smartphones en el mundo, cuyas primeras tres posiciones eran ocupadas por Samsung, Apple y Huawei en ese orden, al menos durante esos tres meses, ya que el tercer lugar suele pertenecer a Nokia si hablamos de períodos de tiempo más largos. La empresa de Kaz Hirai tiene como meta en un año ya ocupar el tercer puesto entre los mayores fabricantes de smartphones.
Lo más curioso de todo es que esta aventura la emprenderá de la mano no de una sino de dos plataformas: Android u Firefox OS. Los terminales de la casa funcionando con el primer sistema operativo ya son muy conocidos en el mundo, pero la segunda plataforma supone la nueva apuesta no sólo de Sony sino también de varios otros fabricantes para realizar lanzamiento en los territorios con economías emergentes.
Durante la pasada Mobile World Congress, que en lo personal yo llamo como "el MWC de los mercados emergentes", escuchamos mucho hablar de Firefox OS y nos sorprendió que Sony se sumara a la tendencia. Su propósito es claro, hacerse un buen lugar en este tipo de mercado que supone el 80% de la población mundial, un número de consumidores potenciales muy atractivo.