Más de pestañas. Hace un rato os hablaba de Private Tab, un complemento para Mozilla Firefox que nos permitía abrir pestañas de incógnito en una sesión normal del navegador de Mozilla para así disfrutar de las ventajas de la navegación privada sin tener que abrir una nueva instancia del navegador. Ahora os hablo de OneTab, un gestor de pestañas que se coloca entre los mejores existen para Google Chrome.
Un gestor de pestañas es una extensión que nos permite almacenar y recuperar pestañas de navegador, y es que aunque la navegación por pestañas sea todo un invento, a veces la opción de restaurarlas al inicio se queda corta. De hecho, yo dispongo de tres o cuatro carpetas de favoritos (bookmarks) en las que almaceno las sesiones habituales: Una para blogging, otra con las redes sociales, etc.
Aunque eso sea una buena idea, disponer de un gestor de pestañas puede ser especialmente útil si solemos trabajar con varios grupos diferenciados de pestañas, como es mi caso, o si simplemente queremos recuperar las pestañas que teníamos abiertas en un determinado momento. La potencia de OneTab como gestor de pestañas reside en la facilidad con la que podemos librarnos de todas esas pestañas que realmente no usamos pulsando únicamente el botón de la extensión.
Al hacerlo, guardamos todas las pestañas no ancladas y las cerramos, mostrándose la página resumen del gestor de pestañas en la que podemos ver las páginas que había en la sesión. Se trata de una forma súmamente útil de guardarnos la sesión y despreocuparnos, y es que si más tarde iniciamos otra, podremos volver a acceder al gestor de pestañas para restaurar la sesión anterior o eliminarla definitivamente. El caso puede ser que queramos reiniciar la máquina y no perder el trabajo, por si hay alguna pestaña interesante. Al reinicio podemos acceder a OneTab y pulsar repasar la lista, eliminando todos los elementos no interesantes, restaurando o incluso salvando la sesión como una página web.
Esta última opción sube la sesión a la nube y nos proporciona una URL y un código QR, permitiéndonos recuperar la sesión desde cualquier parte del mundo y cualquier navegador. Ideal para uso propio o incluso para compartir con otros colegas o amigos.