Hoy entró en rigor la decisión de la ITC para prohibir la importación a Estados Unidos de 18 productos, en los que se incluyen tabletas y smartphones de Motorola que corran Android. La razón es por violación de una patente, cosa que últimamente no nos extraña que esté sucediendo dentro de Estados Unidos. Pero en este caso no es Apple sino Microsoft quien interpuso una demanda en mayo contra Motorola Mobility por usar sin permiso la propiedad intelectual registrada para ActiveSync.
Según Microsoft, y ahora avalado por tribunales, Motorola permite que Android use la patente de ActiveSync para crear y organizar reuniones mediante correo electrónico. La patente está registrada por Microsoft desde 2003 y vence en 2018.
Que la decisión esté tomada y se demuestra que efectivamente se viola una patente, no queda de otra —en el caso de Motorola— que pagarle a Microsoft por el uso o, como viene haciendo la mayoría, modificando el software. De lo contrario, que obviamente no debería suceder, mantendrán el baneo durante algunos años más.
Motorola no está en su mejor momento a pesar de estar respaldad por Google, y esto bloqueo significa pérdidas porque se les está frenando mercancía que termina perdiendo valor si no actúan con rapidez. Algunos de los terminales que se verán afectados son la Motorola Xoom, Atrix, Backflip, Defy, Droid 2, Droid 2 Global, Droid Pro, Droid X, Droid X2, etcétera.
En base a esto Motorla ya se manifestó y admitió la decisión, sin embargo, aprovecharon para aclarar que a pesar del bloqueo, los equipos que ahora mismo están en stock, es decir, disponible en tiendas no están siendo afectados y se siguen vendiendo con normalidad.