Muchos de los usuarios que compraron emocionados sus nuevos equipos D800 y D4 seguramente se habrán llevado una importante decepción al descubrir un problema con estas cámaras. Es que, activando determinadas funcionalidades, los dos modelos experimentaban un bloqueo repentino o se “frizaban”, haciendo que la cámara no respondiera. Nikon ya ha respondido otorgando una solución temporaria al problema.
La compañía nipona afirmó que los clientes afectados por este problema pueden solucionarlo, por el momento, apagando los histogramas del display. Pero no dio explicaciones acerca de por qué estas funcionalidades estarían causando el problema. Todavía no hemos escuchado reportes de usuarios afirmando que la solución ha funcionado.
Sin embargo, esto no será lo último. Nikon está trabajando en una solución definitiva para esto, aunque ha aclarado que solamente se trató de un “pequeño” número de usuarios que lo tuvieron. Pero aunque sea un pequeño número, tener que sacar la batería para que responda una cámara de una buena cantidad de dólares ya es algo importante.
Es muy probable que la solución definitiva al problema involucre una actualización de firmware para estos dos modelos, aunque la firma no ha hecho declaraciones al respecto. Este problema está latente desde la salida de las cámaras al mercado, y los primeros reportes datan de principios de abril. Al menos, sabemos que Nikon tiene un mes de demora en tiempos de respuesta.