Los protectores de pantalla son un complemento imprescindible para cualquier usuario de dispositivos electrónicos, especialmente para todos esos smartphones y tablets con interfaz táctil, que sufren más por tener tan expuesta su pantalla y sufrir constantemente por las partículas que se quedan en la superficie y arrastramos con nuestros dedos. No obstante la tecnología ha avanzado lo suficiente como para crear superficies mucho más resistentes como el Gorilla Glass, que prometen mantener nuestro teléfono libre de cualquier arañazo gracias a su proceso de fabricación, que lo hacen tan duro como sensible al tácto. Claro que todo tiene su límite, y aunque quisiéramos creer que no, incluso las pantallas cubiertas con Gorilla Glass se pueden rayar con el tiempo y el uso, dejándonos feas marcas en la superficie de la pantalla.

Por eso se necesita algo más que protección, y ahí es donde entran en juego las nuevas superficies con capacidad de "repararse" automáticamente. Toray, una firma especializada en la investigación y desarrollo de en compuestos químicos acaba de anunciar una capa de revestimiento auto-reparativa que llegará pronto a las pantallas de todo tipo de dispositivos, entre los que destacan los ordenadores portátiles. Esta película protectora se aplica en mojado sobre una superficie de plástico o polietileno y tiene un grosor típico de 125 micrómetros, lo que la hace perfecta para cualquier tipo de pantalla. Las propiedades de este recubrimiento son poco menos que increibles; si bien los efectos de la "auto-curación" son más evidentes a altas temperaturas, la capa puede repararse en tan sólo 10 segundos a temperatura ambiente, pudiendo ejercer esta propiedad hasta 20.000 veces consecutivas. Por supuesto existen limitaciones a esta reparación automática, y tal como dicta la lógica, cualquier arañazo que sobrepase el compuesto y arañe físicamente la superficie que recubre no podrá ser arreglado, limitándose exclusivamente al daño sufrido por esta capa de revestimiento de apenas 125 micrómetros.

El panel de Toray ofrece una gran transparencia y mínima reflectividad, a la par de otros productos similares del mercado. Lo interesante de esta película es que es por sus características podría ser compatible con otras soluciones de protección, similares al mismo Gorilla Glass, de modo que podría aplicarse sobre cualquier panel de protección para amplificar su efecto, y mantener intacta la superficie de nuestras pantallas durante mucho más tiempo. Toray tiene en mente introducirse en el mercado de las pantallas de tamaño medio, para ordenadores portátiles, pero también apunta hacia otros paneles como los de smartphones y tablets, y aunque reduciría la dureza de la superficie, dado su mínimo grosor no debería impactar negativamente en la sensibilidad del digitalizador, manteniendo todo el rendimiento de la interfaz táctil.

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