Después de la venta de Myspace y conocer que Justin Timberlake andaba detrás de la operación como inversor, no ha trascendido mucho más sobre los planes de futuro de la compañía más allá de la intención de convertirse en un lugar de referencia para el mundo de la música. Realmente, esta intención no sorprende mucho porque el uso que se le daba a esta red, tras la tremenda pérdida de usuarios que ido sufriendo, era el de servir de plataforma para muchos grupos. Pues bien, sin demasiado movimiento tras la compra, parece ser que el relanzamiento de Myspace se retrasará por ahora puesto que el sitio pasará por una fase de rediseño.
Myspace necesita un cambio de rumbo pero no es algo que haya surgido ahora sino que viene desde mucho más atrás. Quizás la era Timberlake pueda darle esa vuelta de tuerca que necesita y que ha provocado que, en un año, el pequeño número de usuarios haya bajado en un 44% y, en consecuencia, los anunciantes no estén muy predispuestos a adquirir espacios con los que promocionarse.
Lo que sí parece que ha trascendido es la fecha de este renacimiento de Myspace, renacimiento que se estima sea el próximo mes de octubre, durante la Advertising Week de Nueva York, evento que acogerá un concierto de varios artistas, incluido Justin Timberlake. Quizás, bajo el paraguas de este evento, se desvele el misterio alrededor de esta reorientación de Myspace que, teniendo en cuenta el marco del evento y su temática, sea una presentación comercial en la que contar las ventajas del nuevo Myspace como plataforma de publicidad y, lógicamente, qué mejor lugar que delante de profesionales del gremio.
Los 35 millones de dólares (casi 25 millones de euros) que se pagaron por la compra de Myspace deben esconder algún tipo de actividad comercial porque, sin eso, no tiene sentido la inversión. Viendo el buen funcionamiento que ha tenido con nuevos grupos y potenciando, precisamente, esta vertiente podría ser una estupenda plataforma de promoción de artistas y podría tener muchas posibilidades (vídeos de conciertos, avances de nuevos discos, etc), eso sí, hay otros factores a conjugar, como es el mundo de las discográficas.
De todas formas, por muchos usos que se nos puedan ocurrir, habrá que esperar un par de semanas para ver qué camino siguen en Myspace y si, de verdad, les hace salir del agujero en el que se encuentran.