Hoy me ha quedado claro cristalino una cosa que sospechaba. Hay un sector de la población que dice querer hacer jailbreak en sus dispositivos iOS por la sencilla razón de tener más libertad a la hora de personalizar las posibilidades del mismo y para poder tener una interesante tienda como Cydia llena de posibilidades que Apple no permite oficialmente. En definitiva, gente que quiere sacar un mayor partido a las posibilidades de iOS. A todos ellos, genial porque están usando una funcionalidad que aunque haga perder la garantía del dispositivo, es legal, así que no hay problema.

Pero también existen otros elementos, que lo único que quieren es instalar un programa llamado Installous, con el propósito de llenar su dispositivo de juegos (mayoritariamente) a los que es materialmente imposible que jueguen a la vez, dada la cantidad, y que se consideran con el derecho de no pagar cantidades "tan estratosféricas" como 0,79€, por un juego. Eso sí, luego se gastarán mucho más en botellones, o en un café, o en pagar una hora de aparcamiento en zona controlada, en una lata de refresco, gasolina para el coche... todo eso sí merece pagar pero ¿por un juego?

Debe ser que estos señores piensan que los juegos son como las setas en el bosque. Una buena provisión de musgo o un helecho bien humedito, y salen por doquier. Los juegos y aplicaciones deben ser lo mismo, y no paran en pensar que hay empresas o desarrolladores independientes detrás, con profesionales que dedican horas a pensar, diseñar, programar, componer la música, grabar las voces, realizar todo tipo de pruebas... un trabajo de meses e incluso años, que se ofrece a un precio asequible y competitivo para que esté al alcance de cualquiera... pero que aun así, ¿por qué pagar? Me lo llevo gratis y punto.

Eso es lo que han de pensar las más de 15.000 personas que juegan al juego Fingerkicks, que aparecen en los tableros del mismo, pero que no han pagado por él. Según leo en el blog de la compañía Gameized, creadores del mismo, el total de ventas reportadas por la App Store desde que lanzaron el juego no supera las 1.200 ventas, y sin embargo, hay algo más de 17.000 usuarios con resultados y diferentes Apple ID en Game Center. Si quitamos aquellos que compran con un mismo Apple ID pero luego usan varios para Game Center (en cuentas familiares) la cifra es algo inferior, pero aun así es realmente vergonzoso ver lo a la ligera que la gente se toma el trabajo de los demás, y piensa que están en el derecho de no pagar nada. Y ojo, Fingerkicks no solo cuesta 0,79€, además ¡¡es universal por lo que nos sirve para iPad y iPhone/iPod Touch!!.

Lo he dicho alguna vez, y es totalmente cierto: estoy a favor del try before buy, y yo mismo lo practico. Hay mucha música en el género que a mi me gusta, y es normal que baje para oír algo y poder tener claro si interesa o no (a veces uso Spotify para eso, que también está bien). En ese sentido, Installous cumple una función que la App Store no permite: bajar el juego o programa, probarlo y ver si realmente merece la pena. Me parece correcto y estamos en nuestro derecho como consumidores. Lo que no me parece bien es que nos lo quedemos y punto.

No estamos hablando de cantidades estratosféricas, nada asequibles. Estamos hablando de un juego que cuesta 0,79€ (0,99$) que es mucho menos de lo que pagamos día a día por otras cosas, pero claro, aquí entramos en un problema cultural. Robar un CD es un delito, porque estamos robando un CD (algo físico y tangible), pero bajarlo no porque no hay nada tangible ("solo" son datos). Si vamos a la tienda y nos llevamos un juego de Nintendo DS debajo de la camisa está muy mal y no lo hacemos porque es un robo, pero bajarlo por internet ya no es lo mismo... la culpa no existe. No señores, estamos hablando de lo mismo.

De paso, y como puntualización, vaya también un toque de atención para Apple pues, sinceramente, me parece que no se han dado cuenta que permitir que juegos piratas puedan usar Game Center y todas sus funcionalidades, es un flaco favor para su modelo de negocio. Como ya hace, por ejemplo, Microsoft baneando las consolas Xbox 360 que son modificadas en su firmware para permitir copias piratas, Game Center debería hacer lo mismo. No debería permitir usar Game Center a los Apple ID que no hayan adquirido el juego legalmente.

Al final, bajo mi punto de vista, el futuro del consumo cultural pasa porque el usuario pueda probar el producto: demos de juegos para probarlo como hay en plataformas como Xbox 360 o PlayStation 3, servicios como Spotify que me permitan oír toda la música que quiera y seleccionar cual es aquella por la que merece la pena pagar o servicios como NetFlix que me permitan ver las películas que quiera, y cuando vea alguna buena comprarla si quiero. Servicios que sean asequibles a cualquier público, que permitan consumir de una manera fácil y directa y poder elegir con todas las garantías lo que nos gusta y pagar por ello.

Pero el robo de algo que no es tangible, como la descarga de un juego, no es lícito. Y al final, nos guste o no, estamos robando por una razón muy sencilla: estamos obteniendo algo que tiene un precio sin dar el mismo. Estaremos robando 0,79€ que no puede ser considerado ni delito, pero lo estamos haciendo y eso está mal. A la única persona que ayudamos y al único que favorecemos es a nosotros mismos, pero estamos dañando a muchos con ese acto.

El fallo actual del mercado son dos, a mi modo de ver: precios que no corresponden con los productos (demasiado caros en muchos casos) y no tener la oportunidad de ver, oír o jugar a aquello que vamos a adquirir, antes de hacer la inversión. Pero esta gente está demostrando que ni siquiera así es suficiente. Están demostrando que hay un sector muy importante de la población que no pagará nada porque se consideran con el derecho de usar lo que quieran sin importar qué o quién ha realizado ese trabajo. Eso no me parece bien.

Ni todos son unos piratas delincuentes, ni la industria cultural es una Santa. Hay un término medio en que existen conflictos que hay que solucionar y modelos de negocio que hay que redefinir. Conceptos abusivos y obsoletos como la actual aplicación de los derechos de autor, con una duración de 70 años tras la muerte del autor, deben ser cambiados. Pero han de serlo para adaptarse a una realidad muy clara:

  • Donde el autor o autores de una obra (música, película, juego, etc.) perciban una remuneración por su trabajo, la más alta de todas en porcentaje ya que son los creadores y origen.
  • Donde los canales de distribución sean cómodos, eficaces y asequibles a cualquier persona de cualquier capacidad económica, recibiendo una remuneración por su desempeño, pero muy inferior al autor.
  • Donde las conceptos absurdos de compensación por copia privada o la penalización del probar antes de comprar desaparezca. La prueba antes de la compra ha de ser un derecho.

Pero si gente como Apple, crea un modelo de negocio de futuro, con un canal de distribución brillante donde el canal recibe un 30% del precio y los creadores un 70% (la mayor parte) y pone un producto a un precio asequible a cualquier bolsillo... lo que no podemos hacer es permitir que una serie de personas sin moral se aprovechen de ello y ni siquiera crean que merece la pena pagar esa nimia cantidad por el esfuerzo de un equipo, empresa o desarrollador.

Por favor, es muy sencillo. Es tan fácil como pagar por la manzana que compran en la tienda o el chicle en la de gominolas. Hay que pagar por ello, de igual forma que no se les ocurre irse con el chicle corriendo. Hay que pagar el precio de las cosas (parece increíble que tenga que decir esto) y con ello se conseguirá que cada vez más empresas hagan juegos y que todos los disfrutemos. Si en la tienda de chucherías el 80% de la gente se llevara las cosas sin pagar, al final esta tendría que cerrar, ¿no? Viendo este brutal porcentaje de piratería en iOS (y eso que es más complejo de piratear y se entiende como un ecosistema que está funcionando) ahora me explico por qué ninguna empresa en sus cabales apuesta por Android donde los niveles de piratería son aun mayores. Y es una pena, porque si las empresas vieran potencial en Android y apostaran por él, serían brutales las posibilidades.

Y por cierto, no me vale el tema de las tarjetas de crédito y que no quiero darlas por internet (pero luego sí se la doy a un camarero que no conozco para que se pierda de mi vista y me cobre la comida, para de paso, pasarla por un duplicador si es menester). Si no nos fiamos (algo que me parece completamente coherente y lícito) o simplemente, no tenemos tarjeta de crédito o débito, hay una fácil solución: en cualquier gran superficie existen unas magníficas tarjetas prepago de iTunes por 15€, que nos darán para mucho y donde no hay que dar ninguna tarjeta de nada. Más seguro y rápido imposible.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: