Nexus S es el último teléfono Android de Google. Heredero directo del Nexus One y del Samsung Galaxy S. Un buen linaje para un móvil que, aún siendo novedoso, no termina de sorprender del todo. Parece que el salto de prestaciones ha sido bastante menor a lo que veníamos viendo. Parte de la culpa la tiene la madurez del mercado que está homogeneizando muchas de las características llegando a un aparente tope.
El Nexus S comparte muchas características ya vista en los anteriores, por eso vamos a analizar las diferencias, tanto estéticas como los detalles técnicos, para descubrir que nos aporta y si nos deberíamos plantear un hipotético cambio teniendo alguno de los anteriores, Nexus One o Galaxy S. Salvo Android 2.3 que incorpora el Nexus S y llegará, esperemos que dentro de un tiempo corto, al resto.
Diseño exterior. La pantalla en el Nexus S es de 4 pulgadas SuperAMOLED, al igual que el Samsung Galaxy S y más grande que los 3,7 pulgadas del Nexus One, simplemente AMOLED. Pero los tres móviles comparte la misma resolución de 800 x 480.
El diseño exterior del Nexus S comparte más similitudes con el Galaxy S en sus formas curvas y su color negro, además aporta la curvatura de la pantalla que, según dicen, mejora la visibilidad. Por el otro lado nos encontramos con el diseño más plano y grisáceo del Nexus One, líneas más rectas que no hacen parecer al móvil una carcasa de plástico como aparenta el Nexus S.
Procesador y memoria. El procesador que incorpora el Nexus S es el fabricado por Samsung, llamado Humingbird. Tiene la misma velocidad (1 Ghz), pero su rendimiento, gracias a la GPU integrada es bastante mejor que Snapdragon del Nexus One, sobretodo en juegos.
Los tres comparte la misma cantidad de memoria RAM (512 MB), la cual ha demostrado que sigue permitiendo ejecutar varias aplicaciones de forma fluida. Parece que aún no es necesario aumentarla, pero todo llegará.
Características extras. El Nexus S se distancia en la cámara frontal que incorpora para hacer videollamadas y la tecnología NFC de la que hemos hablado anteriormente. Con respecto al Samsung Galaxy S pierde el receptor FM. Además de dos elementos que tampoco incorpora el Nexus One como el giroscopio y Bluetooth 2.1 o la WiFi 802.11 n.
Un dato que nos sorprendió fue la ausencia de slot para tarjetas SD en el Nexus S. Se ha optado por una memoria interna de 16GB, cosa que me parece bien. Ya que al final siempre andamos justos de memoria interna en el teléfono para instalar aplicaciones y pedimos poder mover aplicaciones a la SD, ahora parece que esa no será una de nuestras preocupaciones.
¿Cambiamos nuestro Nexus One o Samsung Galaxy S por un Nexus S? Rotundamente no. Puede aportarnos algunas características extras, pero no las suficientes para valorar un cambio. Todo depende de las necesidades que tengamos, pero en principio ni la tecnología NFC ni la cámara frontal son decisorias. Tampoco me acaba de gustar el diseño plasticucho del Nexus S ni sus líneas curvas.
Más información: Comparativa de especificaciones técnicas Nexus S, Nexus One y Samsung Galaxy S