Parece que este es el año de las defunciones de algunas de las tecnologías clásicas que han dejado huella a lo largo del siglo pasado y parte del actual. En abril fue el disquete, el cual recibió su sentencia de muerte tras anunciar Sony que dejaría de fabricarlo. Hoy le ha llegado el turno al Walkman de cassette, todo un clásico que ha acompañado a millones de personas en todo el mundo de forma similar a como lo hacen hoy en día los iPod. Sony (otra vez) ha comunicado que dejará de producirlo en sus factorías. Yo, como antiguo poseedor de una de estas maravillas, no he podido evitar sentir una oleada de nostalgia al enterarme de la noticia. Aún tengo un cajón lleno de cassettes que en su día pasaron por uno de los muchos modelos que lanzó Sony al mercado (el de la fotografía corresponde al TPS-L2, el primero de todos).
Algunos se preguntarán "¿Pero esto aún se fabricaba?". Pues al parecer sí. Sony seguía fabricando los Walkman de cassette en Japón, a pesar de que las ventas y el uso de este producto eran casi residuales. Eso ahora, porque en los más de 30 años que llevaban entre nosotros se han llegado a vender en todo el mundo más de 200 millones de unidades. Unas cifras impresionantes, y más teniendo en cuenta que suponen la mitad de las ventas de la serie Walkman que, por cierto, seguirá viva gracias a los modelos con CD (habrá que ver durante cuánto tiempo), MiniDisc, y los reconvertidos en reproductores multimedia.
Si eres una de esas personas a las que les gusta coleccionar todo tipo de productos retro, o simplemente eres un nostálgico que se resiste a dar por muertos a los Walkman de cassette, debes saber que fabricantes chinos seguirán produciendo unidades patrocinadas por Sony y destinadas a Asia y algunos países árabes. En cualquier caso, ha llegado el momento de pasar página tecnológica y mirar de una vez hacia el futuro, si es que no lo habéis hecho ya. La duda que queda es, ¿qué tecnología será la siguiente? ¿Apuestas? Yo digo que el siguiente en morir será el DVD.