El Proyecto MeeGo dio a conocer hace unos días nuevas capturas de pantalla de la interfaz de usuario de su esperado sistema operativo. Algunos piensan que nos ofrecen una vista previa de cómo se verá MeeGo sobre el recién filtrado Nokia N9.
Por su parte, Gizmovil nos ofrece una detallada y excelente revisión de los diferentes aspectos representados en cada imagen. Aquí retomo el tema para poner a consideración varias ideas en relación con el Proyecto Meego, su diseño y desarrollo.
Uno de los objetivos de diseño más importantes a cumplir con una interfaz de usuario en general, en particular de dispositivos móviles, es la sensación de _organicidad_ que debe ofrecer. Claro, con eso me refiero a la naturalidad con la que el usuario explota (usa, entiende, aprende y optimiza) las funcionalidades del dispositivo, de forma gradual y sin necesidad de recurrir cada 5 minutos a una guía en internet.
Así pues, el dispositivo móvil debe ser una extensión de su dueño y no un molesto bloque electrónico.
En buena medida el éxito de un software para móviles está determinado por los factores recién mencionados. Ahora bien, ¿cómo lo está haciendo MeeGo al respecto? A juzgar por las imágenes (les invito a apreciarlas en la galería insertada abajo): MeeGo fluye.
Cada una de esas imágenes sigue estrictos principios de diseño, los cuales han sido predefinidos de forma ordenada por la comunidad. Así, por un lado tenemos reglas claras y generales de cómo crear temas personalizados para MeeGo -y una de las promesas del proyecto- a partir de archivos CSS. Y por otro, la libertad para crear las nuestras para nuestros propósitos, y con la ayuda de guías muy puntuales.
Y es precisamente gracias a ese interesante balance entre reglas claras y liberta que creo que MeeGo fluye en varios sentidos: código, diseño, comunidad, plataforma. Vamos, lo hace de forma libre aunque ordenada, y demostrando que es así desde el diseño mismo de las interfaces de usuario hasta el corazón mismo del kernel.
MeeGo ya está aquí y alza impetuoso la mano como una importante alternativa de desarrollo y diseño: una oportunidad sin precedentes para los desarrolladores de código libre y abierto en la plataforma que, vamos a reconocerlo, el iPhone propulsó técnica y económicamente: la de los dispositivos móviles.