La fotografía callejera es un estilo de fotografía muy fresco y espontáneo que no sólo consiste en capturar a la gente andando por la calle, sino que intenta reflejar ese momento único. Practicar esta disciplina puede ser muy intimidante al principio, eso de fotografiar a desconocidos, pero cuando le coges el truco es bastante adictivo.
Para fotorgrafiar en la calle lo primero de todo es quitarnos la vergüenza que podemos tener a la hora de disparar a gente que no conocemos por la calle. No te preocupes, si eres discreto no notarán que les has hecho una foto y si se dan cuenta normalmente no les importará. Para perder la vergüenza es bueno quedarse unos diez minutos quieto en un sitio, mirar lo que pasa, observar y ponerse la cámara delante de la cara. Así poco a poco irás adquiriendo confianza para levantar la cámara y te darás cuenta de que no pasa nada por hacer fotos a la gente.
Debemos tener una actitud relajada, sonreir a la gente y caminar con tranquilidad, porque si parece que estamos haciendo algo malo alguien puede ponerse nervioso e increparnos. En cambio, si ven que estamos fotografiando tranquilamente, como quien no quiere la cosa, nos dejarán en paz.
Es impotante estar atento a lo que ocurre a nuestro alrededor y prestar atención a los detalles, no debemos dejar escapar la foto que hemos venido a buscar. Es muy recomendable llevar la cámara siempre encima, no hace falta que sea la reflex, puede ser una compacta o la del móvil. Cuando veas esa situación única tienes que tener la cámara a mano para poder captarla.
En este tipo de fotografía tendremos muy poco tiempo para preparar las tomas, por eso es importante tener lista la cámara para el momento del disparo. Ésto puede ser frustante al principio porque no quedarán muy bien las primeras fotos y tendrás que ir corrigiendo los valores por prueba y error en función de la luz. Precisamente la luz puede ser escasa en los escenarios donde te muevas, además no es recomendable utilizar el flash para no molestar a la gente, así que puedes probar de utilizar ISOs altas para compensar. Un buen consejo es utilizar el disparo en ráfagas, así será más fácil que captes el momento exacto que querías plasmar en la foto. Ya sabes, lo importante es practicar y practicar, cuanto más practiques mejores fotos y menos pruebas tendrás que hacer, además te acostumbrarás a la reacción de la gente y te darás cuenta que no suelen ser ten desagradables como te pensabas.
Nuestros ojos deben ser nuestro visor, si llevamos la cámara todo el rato delante de la cara la gente puede ponerse nerviosa y no podremos hacer las fotos. Como ya tienes los ajustes programados, piensa en el encuadre y una vez ya lo has pensabo sube la cámara y haz la foto. Una forma muy diferente de hacer fotos es disparar con la cámara en la cintura, así captarás otros angulos muy interesantes.
Es importante conocer el terreno, el escenario donde te mueves, así puedes utilizar los ajustes que ya conoces y puedes saber que encuadres son mejores, sólo tienes que esperar a que suceda algo. Ésto me recuerda otro aspecto a tener en cuenta, la paciencia. En fotografía callejera es muy importante la paciencia, debes tener calma y esperar que ocurra lo que estás buscando.
Seguramente también te preguntarás si es legal fotografiar a la gente por la calle y si te pueden hacer algo. Lo primero de todo decir que capturar en cualquier sitio público es totalmente legal, aunque eso sí, si alguien se enfada lo mejor es sonreirle, parar de fotografiar y ser diplomático, así evitaremos problemas y podremos seguir fotografiando en otro lado.
Puede que algunos edificios públicos tengan ciertas restricciones por motivos de seguridad a la hora de hacer fotos, por ejemplo los aeropuertos, así que asegurate bien antes de fotografiar dentro de estos edificios. En cuanto a lo que puede hacerte la policía, pues simplemente pararte y cachearte como mucho. Porque no pueden confiscarte el equipo ni borrarte la imágenes sin la autorización de un juez.
Fotos: Kevin Steele, Raphael Borja, Phil Hilfiker
