Mauro os trajo el otro día un vídeo en el que se torturaba a un Motorola Tundra para demostrar hasta dónde aguantaba el teléfono. Hoy tomo el relevo yo para ofreceros un para de vídeos en el que unos desalmados maltratan a un LG Renoir.
De entrada, el vídeo comienza sacando el terminal del congelador. Después lo tiran al suelo, lo pisan, lo meten en una secadora, le echan por encima vino, polvo y hasta lo atropellan con un Focus. Afortunadamente, el LG Renoir sobrevive y sigue funcionando incluso después de pasar por esta odisea. Podéis ver los vídeos de las torturas aquí y aquí.