El cuarto episodio de la segunda temporada de La Casa del Dragón ya se ha emitido. Y lo que ha dejado consigo es uno de los capítulos más impactantes no solo de la serie sino de toda la franquicia de Juego de Tronos. El proyecto está profundizando en los primeros compases de la Danza de los Dragones, la guerra civil entre los Targaryen por hacerse con el Trono de Hierro. Y gracias a -o por culpa de- sus dragones, todo Poniente sufrirá las consecuencias.
En el capítulo anterior de La Casa del Dragón, Rhaneyra viajaba hasta Desembarco del Rey para reunirse con Alicent y pedirle acabar con el sinsentido. Pero la reina de los Verdes rechazaba la oferta y hacía oídos sordos al comprender el malentendido. "Que los seguidores de Rhaenyra crean lo que deseen, como los de Aegon. Se librará una guerra. Muchos morirán. Y el vencedor se sentará en el trono. Sus intenciones [las de Viserys] poco cuentan. Murieron con él", reflexiona hablando con Larys Strong. La monarca sabe que el conflicto es ya inevitable. Por eso, para ganarlo, también le pide a su hijo Aegon que se haga a un lado y se mantenga pasivo mientras su consejo gobierna por él.
Pero el nuevo rey de La Casa del Dragón no acepta la petición de su madre. Dolido por sentirse insignificante pese a ser, a su parecer, el elegido para reinar sobre Poniente, toma una decisión radical. Sabiendo que ser Criston Cole y su ejército pretenden tomar Reposo del Grajo, sube a lomos de su dragón, Fuegosol, para ir a ayudar. Pero lo que allí se encuentra es una brutal resistencia de los seguidores de Rhaenyra, liderados por la princesa Rhaenys y su monumental dragona Meleys.
En el caso de encontrarse con un dragón frente a ellos, el plan de Criston Cole era contraatacar con Vhagar, la dragona más grande y feroz de los Siete Reinos, que permanecía escondida en el bosque junto a Aemond. Pero Aegon lo desconocía y se lanza a por Meleys, ofreciendo el primer gran combate entre dragones de la serie. Este primer envite termina cuando Aemond llega a lomos de Vhagar y lanza una potente llamarada hacia ellos dos. Rhaenys y Meleys consiguen salir con vida de ese brutal ataque, pero Aegon y Fuegosol se precipitan hacia el bosque.
¿Ha muerto Aegon en La Casa del Dragón?
A pesar de saber que no es rival para Vhagar, Rhaenys se niega a rendirse y regresa a la batalla. Pero la enorme dragona pilla por sorpresa a la princesa y a Meleys, tal y como hizo con Luke y Arrax al final de la primera temporada de La Casa del Dragón. Agarrando a la dragona roja por el cuello, acaba con su vida y hace que Rhaenys caiga al vacío con el cadáver de su animal, compartiendo su mismo destino. Una trágica muerte para los Negros, otra vez, a manos de Aemond y Vhagar.
Pero el episodio aún debe resolver la duda de si Aegon y Fuegosol han muerto también. Y ser Criston Cole es quien halla la respuesta. Tras caer inconsciente a causa de la pelea entre dragones, despierta y empieza a buscar desesperadamente a su rey. Al llegar al lugar, encuentra a Aemond con su espada desenvainada. El joven príncipe tuerto recoge del suelo la daga de acero valyrio que llevaba su hermano y le señala a Cole el cuerpo del monarca y del dragón.
El destino del rey queda sin resolver en el nuevo episodio de La Casa del Dragón. Sin embargo, una vez más, el libro de Fuego y Sangre de George R.R. Martin tiene la respuesta. En él se indica que Aegon no muere en Reposo del Grajo. Eso sí, queda muy malherido y con severas quemaduras, por lo que necesitará mucho tiempo para poder recuperarse. En cuanto a Fuegosol, en el libro tampoco muere. Su magullado cuerpo es incapaz de volar, por lo que se queda allí, siendo protegido por el ejército de Criston Cole hasta que sane de sus heridas.
¿Ha intentado Aemond matar a Aegon?
Aunque Aegon no esté muerto -salvo sorpresa en la serie- hay un elemento que sí ha resultado impactante en la batalla de Reposo del Grajo. Y es que en el libro Aemond nunca traiciona a su hermano. En La Casa del Dragón, sin embargo, el príncipe parece hacerlo hasta dos veces en este capítulo, movido por el odio hacia él y la ambición por la corona. La primera vez es cuando hace que Vhagar escupa su llamarada a Meleys y Fuegosol, sin importarle que el rey esté sobre uno de los dos dragones.
La segunda vez es justo al final del episodio de La Casa del Dragón. Cuando Cole le encuentra con la espada desenvainada, todo parece sugerir que Aemond estaba listo para rematar a su hermano. Si el caballero de la Guardia Real no hubiera llegado a tiempo, podría haber culpado a Rhaenys de la muerte de Aegon sin levantar sospechas. Y con el monarca muerto y sin descendencia masculina, él sería el nuevo rey. Un plan que, para su desgracia, no termina de salirle bien.
Eso sí, con Aegon totalmente inhabilitado para ejercer de rey y gobernar Poniente por sus heridas, Aemond asumirá igualmente el papel de cara a los próximos pasos de la guerra. Para descubrir las consecuencias de la sádica batalla de Reposo del Grajo habrá que esperar al siguiente capítulo de La Casa del Dragón, que se estrena en Max el lunes 15 de julio en España, la noche del domingo 14 de julio en América Latina.
