Desde la antigua Grecia hasta la mitología nórdica, son muchas las culturas que han representado el ouroboros como símbolo de la eternidad. También se utilizaba en alquimia, para representar la unión de todas las cosas. Es una imagen en la que puede verse a una serpiente mordiéndose la cola, formando un círculo que representa un ciclo sin fin. Pero también es algo que puede verse en la vida real. No lo hacen a diario, pero sí que se han documentado muchísimos casos de estos reptiles cometiendo autocanibalismo.
No se sabe muy bien por qué lo hacen. La mayoría de casos registrados han sido de serpientes en cautividad, aunque también puede que lo hagan en la naturaleza; pero que, simplemente, no las veamos. Parece ser más frecuente cuando están sometidas a estrés o a un excesivo calor. También se cree que pueden hacerlo cuando tienen hambre.
No pasa nada si son venenosas, pues suelen ser resistentes a su propio veneno. Sin embargo, sus escamas pueden ser dañadas por los jugos gástricos y sus colmillos provocan heridas susceptibles de infectarse con facilidad. Por eso, en realidad, una serpiente mordiéndose la cola es algo mucho más real y macabro que el legendario ouroboros.
El calor como principal culpable
Son muchas las hipótesis, pero el calor está presente en muchas de ellas. Por un lado, cuando hace demasiado calor, las serpientes suelen tener más hambre. Y, por otro, si no son capaces de encontrar una sombra, pueden sobrecalentarse y sentirse confusas.
Esta confusión, unida al hambre, puede hacer que confundan su propia cola con la de otra serpiente. Hay muchas especies que comenten canibalismo con otras serpientes, por lo que no es algo tan raro.
Algunas veces siguen tragando, hasta que la punta de la cola llega al estómago, depositando los ácidos que contiene. En otras ocasiones, al primer mordisco paran, pero sus colmillos ya han hecho una herida que puede infectarse.
El estremecedor vídeo de una serpiente mordiéndose la cola
Muchos casos se han registrado por escrito, pero algunos también han podido filmarse en vídeo. Recientemente, por ejemplo, se ha publicado este vídeo de una serpiente mordiéndose la cola en una tienda de animales. Según se explica en la descripción de la publicación de Youtube, el animal debía estar pasando tanta hambre que comienza a morderse a sí misma. Está sola, no hay confusión, pero es el único alimento que tiene a su disposición.
Al principio parece que va a parar, pero después se ceba con su falsa presa y comienza a verse sangrar cada vez más. Es un vídeo bastante desagradable, tanto por las imágenes como por las risas de las personas que presencian la escena.
De hecho, se ha comprobado que, si se les pone desinfectante cerca de la cabeza, el olor les hace soltar la cola. Pero en este caso no parece que les esté importando ver lo que hace.
Nada que ver con el majestuoso ouroboros. Pero natural y real como la vida misma. Por desgracia, en esta ocasión, si la serpiente sufre heridas graves, será por la irresponsabilidad de sus propietarios, que empieza por tener a la venta un animal que debería estar libre, en la naturaleza, y termina con las risas y la indiferencia ante el daño que el animal está sufriendo.