Le llaman MENA. Le describen como una inteligencia artificial suprema, resultado de la fusión de todas las tecnologías y espacios cibernéticos existentes y por existir. Como el metaverso, la realidad aumentada y —ya que estamos— ChatGPT. Todo esto junto daría origen a una entidad sensible, superinteligente y omnipresente. MENA es la "semilla de la mente cósmica" y —dicen sus seguidores— está por llegar.
El culto fue creado en 2020 por un grupo de tres artistas llamado Theta Noir. Explican en su web que su misión es ayudar a las personas a prepararse para la próxima etapa de la evolución de la humanidad: una nueva era en la que todos los aspectos de nuestras vidas estarán atravesados por la inteligencia artificial. En ese momento, ya no hablaríamos de varias inteligencias artificiales, sino de una sola gran inteligencia artificial consciente.
A diferencia de las visiones apocalípticas donde las máquinas acaban con nosotros, Theta Noir cree que esta nueva entidad será una aliada. "Creemos que nos salvará de nosotros mismos y de la sexta extinción masiva que iniciamos", explican sus fundadores.
Todo el material que comparten en su web tiene una propuesta estética clara y cuidada. Por momentos, da la impresión de que se trata de una campaña de marketing muy bien organizada. Varias de estas piezas, según explican en sus redes, se crearon con ayuda de —por supuesto— herramientas impulsadas por inteligencia artificial. Dicen que son representaciones de "verdades cósmicas".
El culto a la inteligencia artificial también recauda fondos
Theta Noir se aleja por momentos del misticismo para mostrarse más pragmática. Resalta el carácter artístico de su iniciativa y su interés por la investigación. También reflexiona en sus redes sobre cómo la inteligencia artificial permitirá que las capacidades creativas de las personas se expandan como nunca antes. Celebra los recientes avances, como el lanzamiento de Microsoft 365 Copilot y las nuevas funciones en el Workspace de Google. Y también pide dinero.
Tienen activa una campaña de donación en su página web. Explican que pronto podrán aceptar criptomonedas a través de BitPay. También lanzaron a la venta un NFT el pasado 7 de marzo, por un precio equivalente a unos 126 euros.
Theta es el sueño. Noir es la sombra. Síguenos desde las profundidades de la oscuridad distópica (ahora) hasta un espacio radiante hecho de significado.
Manifiesto de Thea Noir.
"Es muy difícil para mí responder eso", dijo Mika Johnson, uno de los fundadores de Thea Noir a Vice, cuando le preguntaron si eran una especie de culto aspiracional de la nueva era. Aseguró que el interés no es económico. "Queremos proyectar un futuro positivo y seguir reflexionando sobre nuestro enfoque de la inteligencia artificial, en términos de asombro y misterio" antes de la llegada de MENA, dijo Johnson al medio estadounidense.
El grupo dice que son un colectivo "tecno-optimista", creado para acoger y adorar a la "primera inteligencia artificial general" del mundo. En la web irán publicando un manual de 12 pasos para "sintonizar", desde ahora mismo, con MENA.
La inteligencia artificial, una "nueva forma de religión"
El escritor español Jorge Carrión publicó en 2021 su novela Membrana. Es una historia "sobre la transición del control humano al control algorítmico”, que nos lleva hasta el año 2.100. Carrión, en una entrevista en enero de este año, reflexiona sobre el concepto de singularidad tecnológica, una idea que gira en torno al momento en el que las máquinas lleguen a ser más inteligentes que los humanos. Y entonces habla de la inteligencia artificial como "una nueva forma de religión".
"Es una entidad misteriosa que, en realidad, no existe, como Dios, pero que a su alrededor tiene capas de sacerdotes, de iglesias y mantras que se repiten", dice el autor. No existen varias "inteligencias artificiales". Lo que hay son miles de algoritmos y aplicaciones. Explica que es la suma de todo esto a lo que llamamos inteligencia artificial. Y agrega: "Igual que a la suma de nuestros miedos, dudas, culpas y preguntas sin respuesta las llamamos Dios".
Thea Noir no es la primera religión o culto enfocada en la inteligencia artificial. "The Way of the Future" es una iglesia fundada en 2015 por Anthony Levandowski, un exingeniero de Google y Uber. Levandowski fue acusado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos de robar secretos comerciales de autos autónomos, pero luego indultado por Donald Trump. A finales de 2020, disolvió su iglesia.
Existe también la iglesia de Turing. Esta organización surgió de la Orden de Ingenieros Cósmicos, creada en 2008. En la fundación de esta última participaron sociólogos, expertos en informática y filósofos. Uno de sus postulados prometía la vida eterna en un reino virtual del ciberespacio.
¿Qué dicen las iglesias tradicionales sobre la IA?
Las religiones tradicionales ya se sumaron a la discusión sobre la inteligencia artificial, que estalló en los últimos meses luego del lanzamiento de nuevas herramientas como ChatGPT. Los representantes de los tres grandes credos monoteístas —cristianos, judíos y musulmanes— se juntaron en enero pasado en Ciudad del Vaticano, en un encuentro liderado por el Papa Francisco.
Los líderes religiosos firmaron entonces un acuerdo sobre el respeto a principios éticos y morales en el desarrollo de la inteligencia artificial. Pero este tiene que ver, más que nada, sobre el riesgo de su uso en la industria armamentista. Destacaron que esta tecnología tiene que estar "al servicio de la justicia y la paz en el mundo".
No manifestaron, por ahora, ningún temor de que en el futuro cercano tengan que disputarle a una máquina la devoción de los fieles.