Elon Musk ha puesto en marcha su plan de convertir a Twitter en una app "todo en uno", al estilo WeChat. De acuerdo con un reporte de Financial Times, la empresa está trabajando en un sistema de pagos para integrarlo en la plataforma. El proyecto está a cargo de Esther Crawford, directora de Gestión de Producto en Twitter, quien lidera un pequeño equipo enfocado en definir los pasos necesarios para su implementación.

Fuentes cercanas a la empresa revelaron que Twitter avanza en el desarrollo de su sistema de pagos. No solo comenzó a solicitar licencias regulatorias en Estados Unidos, sino que también trabaja en la creación de una bóveda para almacenar y proteger los datos de los usuarios que lo utilicen. Si todo sale acorde al plan, los pagos llegarían a Twitter en 2024 para los usuarios de Estados Unidos, con miras a expandirse a otros territorios a futuro.

La idea de una super app es algo que Elon Musk delineó antes de concretar la adquisición de Twitter. El magnate declaró que uno de los motivos que lo alentaron a comprar la empresa era acelerar la creación de una plataforma multifuncional. X, o "la app para todo", sería la respuesta a WeChat donde los usuarios tendrían acceso a la red social, noticias, ocio y un sistema de pagos o gestión de trámites.

Posteriormente, Elon Musk refrendó esta idea en una llamada con anunciantes en noviembre. Durante el mismo mes, The New York Times reportó que Twitter presentó documentos de registro ante la oficina de control de delitos financieros (FinCEN) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Este paso, necesario para quienes desean hacer negocios con servicios de transferencia, cambios de divisa o emisión de cheques, dejó claro que el plan de la super app estaba en marcha.

Elon Musk necesita la aprobación regulatoria para implementar los pagos en Twitter

Elon Musk Twitter, multimillonario

Si bien la idea de que Twitter se convierta en una app para todo suena interesante, el despliegue de un sistema de pagos es complejo. Elon Musk no solo enfrentará un obstáculo técnico, sino que tendrá que convencer a los reguladores para obtener su aprobación. Fuentes cercanas a la compañía confiaron que Twitter ya solicitó licencias estatales y federales con la esperanza de que se aprueben en un año.

Para que Twitter pueda competir contra otros sistemas de pago establecidos, primero debe cumplir con ciertos requisitos. De entrada, el Departamento del Tesoro establece que todas las empresas involucradas en operaciones financieras deben alertar a las autoridades sobre cualquier actividad inusual. Para evitar fraudes, los usuarios tendrían que enlazar su cuenta a un perfil real. Cualquier fallo no reportado, le costaría a la empresa una multa millonaria.

Aunque todos estos requisitos no representarían problema para una persona enfocada como Musk, sus acciones no lo favorecen. Tras cerrar la compra de Twitter, el magnate despidió a un número considerable de empleados, algunos de ellos a cargo de áreas críticas. En los afectados se encontraba personal responsable de hacer cumplir las leyes de la Unión Europea, poniendo en riesgo su operación en el Viejo Continente.

No solo Twitter necesita crear y mantener una infraestructura de pagos, sino también apegarse a las leyes. Lo primero es costoso, y para ello Musk solicitó el apoyo de los inversionistas con el fin de contratar mayor personal. Lo segundo es más complicado, considerando la relación que tiene Elon Musk con los reguladores. "Elon pone cohetes en el espacio, no le teme a la FTC", dijo su abogado, Alex Spiro, hace unos meses.

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