Tras semanas de especulación, Huawei ha confirmado que retrasará el lanzamiento de su smartphone plegable, el Mate X, para llevar a cabo pruebas adicionales que garanticen que el dispositivo no cuenta con ningún fallo de fábrica que afecte a los usuarios que adquieran el terminal. Unas medidas cautelares que llegan después de la debacle del Samsung Galaxy Fold, cuya fecha de lanzamiento estaba prevista para el pasado mes de abril y que, tras los problemas iniciales reportados, aún sigue sin conocerse cuándo llegará al mercado.
"No queremos que el lanzamiento de un producto arruine nuestra reputación", ha dicho un representante de la compañía al medio norteamericano *CNBC*. Según este, se está trabajando con las operadoras que disponen de conectividad 5G y con los desarrolladores de aplicaciones para que ninguna pieza quede sin afianzar en el puzzle de cara a un estreno al que la tecnológica de Shenzhen sigue apuntando por todo lo alto.
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Si el Galaxy Fold se espera que vea por fin la luz en julio, su rival china fija en septiembre el momento en el que su smartphone plegable de 2 299 euros sea por fin comercializado en todo el mundo.
¿Con o sin Google?
Aunque algunas fuentes apuntaban a que la marca estaría teniendo problemas para fabricar el terminal tras el veto de Estados Unidos y la consiguiente imposibilidad de establecer tratos comerciales con compañías norteamericanas, Huawei asegura que todo está en orden en la cadena de producción y que el retraso se debe únicamente a los citados tests y pruebas extraordinarias que están efectuando. Otra gran pregunta, no obstante, sobrevuela ahora este lanzamiento: ¿llegará con o sin la versión de Android firmada por Google?
Según el citado medio, lo hará con ella, dado que el dispositivo fue presentado con anterioridad a la prohibición comercial. *The Wall Street Journal*, sin embargo, recoge que un responsable de la compañía ha manifestado que este asunto "aún se está discutiendo". Sea como fuere, si el lanzamiento se produce, como se espera, en septiembre en distintos países alrededor del mundo, es de esperar que sí disponga del Android que que todos conocemos, puesto que la versión propietaria que desarrolla Huawei no saldría de China hasta 2020.
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A este respecto, desde la compañía han vuelto a asegurar que su software es solo su último recurso: "No queremos utilizar nuestros propios sistemas; nos gusta mucho cooperar con Google en los últimos años. Pero si nos vemos obligados a hacerlo por nosotros mismos, estamos listos. Podemos hacerlo en los próximos seis a nueve meses".